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La vida, desde anoche, es menos maravillosa. Se ha ido un mito, un grande, un genio, un transgresor, un inventor del verbo, un padre y marido y una persona sensacional. Alguien nico e irrepetible. Un jugn entre jugones. Descansa en paz, Andrs Montes. Gracias por los momentos vividos. El planeta basket se queda hurfano definitivamente. La prdida es irreparable.

Resulta imposible hablar de Andrs sin que a uno se le dibuje una sonrisa en la boca. Recuerdo perfectamente una comida en el Saign con Rafa Alique para ficharle para MARCA.com y cmo nos dijo que le estbamos vendiendo una bacalada pero que se suba al barco. Nos inventamos el Rincn del Jugn, con sus artculos y audios comentados que mandaba desde el saln de su casa cuando ya amaneca el da con una msica perfectamente escogida para la ocasin, el Trivial de Montes y el Diccionario del Jugn. Algo que le encant a Montes y permanentemente me llamaba para actualizarlo a cualquier hora.

En aquella comida se lanz la idea de hacer algo para la Radio y poco despus naci ‘No sabes cmo te quiero’, uno de los mejores programas de la historia. Desde “el paseo martimo de la Castellana” se dedicaba a “estirar el chicle” en las ondas, y a base de genialidades y de “no informar nada y vender el mueco” cumpla la primera media hora del programa. Ton Llorente y yo tuvimos una seccin, o un amago de seccin porque con Andrs nunca sabas qu iba a pasar. La idea era hablar de NBA y basket, pero hablbamos de todo menos eso. Desinformbamos. Era genial. “Schell, precisin suiza, hoy qu? bacalada no?”, me deca. Y nos reamos.

Tambin estaban sus artculos semanales en el suplemento de basket de MARCA de 3,05. Por supuesto era lo ltimo que cerrbamos, pero eran geniales. Era nico, un autntico genio capaz de hacer que te tragaras un Indiana-Charlotte a las cuatro de la maana gracias al tndem nico e irrepetible que form con Antoni Daimiel. De lo mejor que se ha visto y ver en la tele. Invent un idioma, un estilo.

Aos ms tarde, lleg el Mundial de Japn con l en laSexta. Bajaba al desayuno del hotel de Hiroshima, miraba con cierto gesto de asombro las propuestas del chef con pescado crudo y me deca, “Schell, t que tienes mano aqu, no podras conseguir unas tostadas?”. Tanto le machacamos al cocinero que al vernos ya sacaba el pan. Luego en las retransmisiones de los partidos siempre estaba pendiente de los paquetes de embutidos que nos llegaban a Jos Luis Martnez, a Kambala Talavera, Rafa Casal y a m y por la noche comentbamos la jugada en la ltima planta del hotel al ms puro estilo Lost in Translation.

Desde antes de conocerle ya era un andresmontesista confeso, pero desde entonces, ms. Y lo ser toda la vida. Ahora ya slo nos queda recurrir a Youtube para recordar sus mticas retransmisiones, su forma de vender el mueco y las motos, su “Brrrrrrrr”, el “jugn, jugn”, “triiiiiiiiple”, “raza blanca tirador” y mil inventos ms a bordo de las “Aerolneas Jordan” mientras intentamos descifrar el ‘artculo 34’ al completo y esperamos que Antoni nos responda la gran inquietud de Montes: “Por qu todos los jugones sonren igual?”. Un abrazo.