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Antes del gol de Torres, antes de que La Roja fuera la seleccin ms respetada del panorama futbolstico internacional, hubo un grupo de 'intrpidos' espaoles que se atrevi a desafiar el orden natural de las cosas, que logr, en definitiva, doblegar por primera vez a la todopoderosa Alemania en un partido oficial.

20 de junio de 1984. Espaa se enfrenta a la Repblica Federal de Alemania en el Parque de los Prncipes de Pars y slo le vale el triunfo para pasar a semifinales de la Eurocopa. La 'Mannschaft' es la actual campeona de Europa y subcampeona del mundo y tiene un equipo de ensueo. Schumacher, Briegel, Stielike, Matthaus, Littbarski, Brehme, Voller, Rummenigge... Un equipo de ensueo o una pesadilla, segn se mire.

"No hay paralelismo posible entre aquel encuentro y ste. Ahora las fuerzas estn mucho ms igualadas. Nosotros bamos a hacer nuestro partido conscientes de que enfrente haba un rival temible. Tenan velocidad, calidad, fuerza... era impresionante. Sabamos que tenamos que defender muy bien y pillarlos a la contra si queramos tener alguna opcin. En definitiva, bamos de pardillos, porque era lo que tocaba en aquella poca".

Quien as habla es Antonio Maceda, autor del gol que aquella noche parisina derrib al gigante teutn. Un tanto que lleg en el minuto 90 y que se celebr en Espaa casi como un ttulo. "Fue el gol ms importante de mi carrera junto a los de Malta y el de las semifinales ante Dinamarca", apunta.

Una pesadilla llamada Briegel
Maceda sonre cuando le cuentan que gran parte de Andaluca no pudo seguir por televisin la ltima media hora de partido por un descomunal y ms que nunca inoportuno apagn. La radio, como tantas otras veces, fue la salvacin de millones de espaoles. "No tena ni idea, nadie me lo haba contado nunca", dice el que fuera exquisito central de Sporting y Real Madrid.

Maceda recuerda casi con cario a su pesadilla particular de aquella noche, un 'bicho' de 1,88 llamado Hans-Peter Briegel. Briegel, para el que no lo sepa, fue un extraordinario central que haba brillado en su etapa juvenil en el decathlon -era capaz de saltar siete metros y medio- y que disfrutaba de un fsico simplemente portentoso.

"El to tena los gemelos como yo los cudriceps. Qu bestia! Yo en principio no marcaba en los crners, pero tras un par de sustos, el mster (Miguel Muoz) me orden vigilarle. Recuerdo que costaba un mundo cogerle el sitio y que moverle era como intentar empujar una roca, casi imposible. S, era un peligro terrible a baln parado".

Respetar a Del Bosque
En su opinin, la seleccin alemana mantiene inalterable sus seas de identidad: "Su fsico siempre est un par de puntitos por encima de cualquier otro equipo y tienen una mentalidad a prueba de bomba. Ellos siguen y siguen con independencia del resultado. Parece que ni sienten ni padecen".

"Adems, la aportacin de los jvenes ha sido clave, porque ahora practican un ftbol mucho ms vistoso que en la Eurocopa de 2008. No cabe duda de que las diferencias entre La Roja y esta Alemania son menores, aunque sigo pensando que Espaa es el mejor equipo del mundo tcnica y tcticamente. Ellos forman un fantstico conjunto aunque la baja de Mller en el duelo de 'semis' se tiene que notar porque est haciendo un Mundial maravilloso", afirma Maceda.

Por otro lado, el otrora zaguero de la seleccin apuesta por el respeto al tcnico a la hora de hablar de posibles cambios en el once de cara a la trascendental cita del mircoles. "Tengo la sensacin de que Del Bosque va a seguir apostando por el mismo once. Lo que hay que hacer es respetarle, porque es l el que convive a diario con ellos. Adems, cabe recordar que los cambios estn revolucionando los partidos y hay que apoyar en todo al seleccionador".

Por ltimo, Maceda rompe una lanza en favor de Puyol y Piqu, sucesores del futbolista de Sagunto en el eje de la zaga de La Roja. "Defensivamente, el equipo est bien. Espaa tiene un estilo matador para los centrales que les obliga a jugar muy adelantados y eso es muy estresante. Para m, Piqu y Puyol estn haciendo un Mundial espectacular y estn casi perfectos en el mano a mano", seala.