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Mara Sharapova es de esa estirpe de deportistas que sabe aprovechar su tirn para buenas causas. La tenista siberiana, que poco a poco est recuperando un hueco entre las 'grandes', siempre se ha acordado de sus orgenes y por eso cada vez que puede echa una mano a los damnificados de Chernbil.

Sharapova concedi este martes una larga entrevista a ESPN, que acompa a la tenista siberiana en un viaje que realiz sta por sus lugares de la infancia. "El accidente de la central nuclear (26 de abril de 1986) cambi mi vida porque yo no hubiera jugado al tenis. Mis padres dejaron todo en la casa donde vivan y nos fuimos de all ", relata la rusa. En ese momento, la familia de Sharapova viva en la regin de Gomel, en Bielorrusia, cerca de la frontera con Ucrania y la ciudad de Chernobyl. La madre de Sharapova estaba embarazada y los padres de Mara emigraron a Siberia, donde naci la ex nmero 1 del mundo.

Luego vino el nacimiento de la estrella, la infancia pasada en Sochi y el encuentro en Mosc con una Martina Navratilova que la convenci, con slo 6 aos, de decantarse por el mundo de la raqueta. En un visto y no visto, la jovencsima Mara estaba haciendo las maletas rumbo a Estados Unidos. "Lo nico que recuerdo es el momento en que estaba guardando todos mis libros en caja y la voz de la madre dicindo,e que no me poda llevar todo eso a Rusia", relata la rusa.

A los nueve aos y tras demostrar maneras, Mara entraba a formar parte en la academia de Nick Bollettieri. Ah se form como campeona y como persona. De agradecer es que nunca renuncie a sus orgenes.