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Sobrado. As conquist el britnico Mark Cavendish su segunda victoria en la Vuelta a Espaa hasta tal punto que se permiti el lujo de realizar un pequeo 'caballito' o saltito (como ustedes prefieran) en la lnea de meta situada en Burgos en la que podra haber sido su ltima etapa en la ronda espaola debido a la llegada de la gran montaa.

Tras completar ayer en Lleida su crculo de victorias en las tres Grandes, 'Cavs' se volvi a dar un homenaje en la tierra de uno de los conquistadores ms legendarios de la historia espaola. Y es que el de la Isla de Mann nunca deja escapar una oportunidad para conquistar un nuevo xito a su kilomtrico palmars.

Ni siquiera los dos puertos situados de tercera categora, situados en los ltimos 60 kilmetros, el Alto de Pradilla y de Valmala, fueron un impedimento para que el de Columbia llegase con el resto del pelotn, pese a que los Garmin intentaron dejarle tirado por el camino.

Sin embargo, la fortuna se ali con Cavendish. Tyler Farrar pinch en la ltima ascensin, cuya cima estaba a 36 kilmetros de meta, impidiendo a sus compaeros imponer un ritmo que sacasen a la luz las escasas cualidades del britnico cuando la carretera se empina.

Tampoco hubo sombra de los anunciados y temidos abanicos. El viento no apareci por las tierras de Castilla y los 'gallitos' de la general pudieron respirar tranquilos. El Caisse d'Epargne ya afilaba las garras para montar una autntica emboscada antes de los apabullantes finales de etapa en Pea Cabarga, Lagos de Covadonga y Cotobello.

Pelotn en jaque
Aislados de todas estas guerras internas, los cinco escapados de la jornada terminaron siendo los protagonistas de la jornada al poner en jaque a los equipos de los sprinters en el descenso camino de Burgos. Allan Davis, Manuele Mori, Olivier Kaisen, Giampaolo Cheula y Niki Terpstra slo pudieron ser alcanzados a siete kilmetros de la meta.

All, en la ltima recta, Cavendish volvi a imponer su ley. Salir primero de la ltima curva, seguir la estela de su lanzador y hacer un vaco inalcanzable entre su rueda trasera y sus perseguidores gracias a una arrancada descomunal. Una pena que pueda ser uno de sus ltimos coletazos en esta Vuelta. A buen seguro que muchos ya se estn frotando las manos.

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