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En el Reyno de Navarra es muy difcil ser original. Debera saberlo el Sporting. En una tarde fra y nortea, los de Preciado se plantaron en Pamplona con la idea de obtener una victoria que disipara la polmica que acompaaba al equipo desde el encuentro ante el Real Madrid. La empresa se complicaba al ver los registros de Osasuna en casa, donde no pierde desde el 22 de marzo.

Los asturianos viajaban con varias bajas sensibles pero con la intencin de regalar un triunfo a su meditico entrenador. Para ello disearon un plan que no concide -o no debera hacerlo- con la idea de ftbol que se les presupone. Entraron al juego de o que propuso Osasuna. Y en esos mimbres no hay equipo que mejor se desenvuelva que los navarros. Cuanto ms calor haga en su estadio y a mayor revoluciones viaje el partido, los rojillos se convierten en un equipo slido e inabordable. Que aprieta y abrasa.

El partido cambi cuando en el minuto 14 Aranda se tuvo que retirar lesionado. Con su marcha, los de Camacho se vean obligados a cambiar el guin. Mientras los locales se recomponan, el Sporting aprovechaba para montar dainas contras gracias al criterio de Rivera y a la movilidad de Novo en zonas de ataque. Los ocasiones se sucedieron para el bando visitante, pero la ms clara lleg en un latigazo de Novo desde la frontal. El ex del Rangers empalm -pura delicatessen- un baln que le haba llovido desde el costado diestro. El esfrico lo acab escupiendo el larguero para alivio de Osasuna en general y de Ricardo en particular. El estadio enmudeci.

Juanfran, desatascador rojillo habitual, intentaba montar escapadas desde su perfil. El fino interior se mostr muy activo y gracias a sus acciones el Sporting se vera obligado a retrasar su posicin. Con el empate a cero y una ligera sensacin de sopor se lleg al intervalo.

Apareci Masoud
Osasuna es un equipo que acostumbra a vivir a impulsos. En ocasiones se muestra muy previsible y necesita de la varita mgica de sus genios para levantar barricadas y tirar muros. Algunos das le toca a Camuas, otros a Juanfran y, no en pocas ocasiones, son los iranes los que salen al rescate. As ocurri en el minuto 53 cuando el conjunto de Camacho sac su manual, repas la leccin "contragolpe" y aplic sus fases. Soriano fue el encargado de dinamitar la accin que supondra el gol de Masoud. El iran bati por bajo a Juan Pablo con la tranquilidad y la sangre fra que se carateriza a los asesinos en serie.

A partir de ese momento el choque se volvi pronosticable. Osasuna retrocedi metros y el Sporting se impacient sabiendo que aquel resultado le mandaba a los puestos que queman. Preciado movi ficha y busc en Guille -joven y prometedor juvenil- el revulsivo que cambiara la inercia peligrosa en la que se haba instaurado el choque. Los navarros se defendieron con autoridad quiz ayudados por la falta de imaginacin visitante. Camacho dio entrada a Vadzc. El hngaro amortiz el precio de la entrada con un control encantado que, de haber entrado su disparo posterior, hubiese significado uno de los goles de la jornada.

El partido agoniz entre los nervios de unos y las prisas de otros. Finalmente, Osasuna volvi a rentabilizar la fortaleza de su castillo. Ya se sabe, el Reyno sigue siendo un fortn.

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