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Jos Joaqun Rojas: "Cancellara es otro mundo" 635lv

Josu Garai. Madrid 09/04/13 - 11:22.

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Jos Joaqun Rojas, el murciano del Movistar, es uno de los pocos espaoles que acab la Pars-Roubaix el domingo. "Me cogi una montonera (una cada masiva) a 70 km de la meta y, como se me enganch la cadena, estuve ms de un minuto parado", explica.

"Despus, junto a Quinziato, estuve 50 km persiguiendo al grupo de cabeza. Los tuvimos cerca, a medio minuto", sigue explicando, hasta que se quedaron sin gasolina justo cuando por delante se desencaden la gran batalla. Lleg a Roubaix a 10:27 de Cancellara. "Creo que hubiera hecho entre los 20 primeros, porque iba muy bien", pero finalmente se tuvo que conformar con el puesto 59.

Tras el incidente, vio a Cancellara en la meta. "Me han dicho que le cost ganar ms que en Flandes, donde nos humill a todos. Est claro que es otro mundo", dice del suizo volador.

Pese al infortunio, Rojas es un enamorado de esta carrera. "Es que es diferente a todas y lo que se ve aqu no se ve en ningn otro sitio. Muchas veces le he dicho a Alejandro (Valverde) que tiene que correr Flandes y Roubaix, porque un ciclista como l tiene que conocerlas. Con Flandes igual lo consigo, pero con Roubaix me parece que no", dice entre risas.

A Rojas le gusta si cabe ms el Tour de Flandes que la Pars-Roubaix. "Es ms duro", dice. "All, cuando te quedas sin gas, no puedes subir los muros, que son autnticas paredes. Hay que ver cmo nos retorcemos en el Koppenberg", seala refirindose a los desniveles del 22%. "Roubaix tambin es muy dura, pero si no puedes ir a 40 km/h, vas a 30 y al menos puedes continuar".

Hroes por un da
Hay ms diferencias: "La salida en la Plaza de Brujas, que suele estar a reventar, es nica. Se te ponen los pelos de punta slo por estar all", explica. "Y los muros, si estn mojados, hay que subirlos con la bici en la mano".

Es puro masoquismo lo suyo. "Soy de los que se apunta voluntario tanto a Flandes como a Roubaix. Crec como ciclista viendo a Tafi y Museeuw y ahora, salvando las distancias, me siento como ellos". Acabar es de hroes. "Ivn Gutirrez lleg ayer por primera vez en su carrera al veldromo de Roubaix y estaba loco de alegra. No es fcil acabar".

Despus de los 254,5 km de recorrido, de los que 52,6 km fueron de pavs, Rojas estaba ayer reventado. "Normalmente, despus de una clsica suelo salir a entrenarme, pero hoy me he quedado en casa porque lo que menos me duelen son las piernas. Hay msculos que no saba que tena y me duelen. Adems de hombros, brazos y cuello, me duelen un montn los dedos".

Los dedos? "S, porque en los pavs hay que dejar un poco suelto el manillar y los dedos chocan entre s". No obstante, confa en estar a punto para acompaar a Valverde en las clsicas de las Ardenas: Amstel, Flecha y Lieja.

Aparte la distancia y los pavs, la Roubaix tiene otras muchas dificultades. "Cuando est seco, se levanta tal polvareda que no ves nada. A veces cierras los ojos y dices: ‘Que sea lo que Dios quiera’. Te guas por el instinto y por el odo". Y as pasa lo que pasa.

Las bicis son especiales. "Son ms largas entre ejes, para que amortiguen ms los golpes. La tija del silln y la horquilla son ms flexibles, para que absorban ms las vibraciones, y los tubulares son de 27 mm (ms anchos) y van menos inflados". El sufrimiento, no obstante, es inevitable.