"Los Juegos deben continuar". De forma tan sencilla como contundente, el presidente del COI, Avery Brundage, confirm que los Juegos Olmpicos de Mnich 1972 no seran ser suspendidos tras sufrir el 5 de septiembre el peor atentado terrorista en la historia de la competicin, en el que resultaron muertos 11 de la delegacin de Israel, 1 polica y 5 secuestradores, mientras otros 3 de estos fueron capturados e intercambiados 53 das despus por un avin secuestrado de Lufthansa.
En el dcimo da de competicin el nadador Mark Spitz firm una de las actuaciones legendarias al sumar con Estados Unidos su sptimo oro en el 4x100 estilos, erigindose "en la figura ms fabulosa de todos los Juegos Olmpicos", en palabras de Carlos Piernavieja en MARCA. Mientras reciba cerca de las ocho de la tarde los parabienes del asombrado mundo del deporte, nadie poda imaginar los trgicos sucesos que acaeceran apenas ocho horas despus y que entre otras muchas consecuencias supondra la salida precipitada del laureado nadador estadounidense de origen israel rumbo a su pas.
Aquella madrugada, alrededor de las cuatro, comenzaron las acciones del brutal ataque que, segn las declaraciones de Al-Gashey, nico superviviente terrorista al cabo de los aos, haba empezado a planificarse con entrenamientos especiales en julio a los palestinos que ejecutaran el plan terrorista. En los primeros das de los Juegos viajaron a la capital de Baviera, asistiendo incluso a varias competiciones, hasta que el 4 de septiembre, el mismo da del festival de Spitz, recibieron las instrucciones de un integrante del comando Septiembre Negro para el ataque.
Tras saltar la valla perimetral de apenas dos metros (era la primera edicin en la villa olmpica estaba cercada), los ocho terroristas se dirigieron el bloque 31 (Espaa estaba situada en el 22). A las 4.30 iniciaron el asalto en el apartamento 1, donde el aviso de un rbitro de lucha libre, Yossef Gutfreud, salv la vida de su compatriota Tuvia Sokolovsky al apostar sus 130 kilos contra la puerta y retrasar unos segundos vitales su entrada, suficiente para que el entrenador de halterofilia escapara por una ventana y se refugiara en la habitacin de los asustados deportistas de Bahamas, que hasta entonces haban identificado los disparos como fuegos artificiales. No corrieron la misma suerte los entrenadores Amitzur Shapira (atletismo), Andre Spitzer (esgrima), Kehat Shorr (tiro olmpico) y el Yacov Springer, rbitro tambin de lucha libre, capturados junto a Gutfreud.
El entrenador de lucha libre Moshe Weinberg fue uno de los dos israeles que dio la vida por sus compatriotas en esos momentos iniciales. Capturado por los terroristas, pas de largo del apartamento 2, donde se alojaban cinco deportistas, y dirigi a parte de sus captores al 3, donde se alojaban luchadores y halterfilos, en la creencia supuestamente de que podran plantarles cara. As lo hizo l, derribando a puetazos a dos de ellos, antes de ser cobardemente acribillado. Del mismo modo que fue asesinado el levantador de pesas Yossef Romano cuando intent defenderse con un cuchillo de cocina, dejndole los agresores desangrarse en las horas siguientes y sufriendo un intento de castracin, segn afirmaciones de su viuda. Finalmente, los halterfilos Eliezer Haflin, David Berger y Zeev Friedman y el luchador Mark Slavin fueron secuestrados junto a sus otros cinco compatriotas.
Tambin fueron retenidos inicialmente varios uruguayos, con un terrorista armado en su puerta, mientras los representantes de Hong-Kong huan y otros dos eran liberados tras una negociacin personal del presidente de su comit con los terroristas.
Pese a las horas de agona, la competicin segua su curso, e incluso los espaoles iban a entrenar con normalidad, con el nico aviso de una mujer limpiadora que haba escuchado la noticia por la radio. No fue hasta la tarde cuando se suspendi la actividad deportiva, ya con los terroristas pidiendo la liberacin de 234 encarcelados entre Israel y Alemania Federal. Las autoridades alemanas eran proclives a la negociacin, pero no as las israeles. Tras superar varios ultimtums de los terroristas, todo deriv en un supuesto acuerdo para que pudieran huir en un avin hasta Egipto, pero una vez en el cercano aeropuerto de Furstenfeldbruck las fuerzas alemanas de seguridad llevaron a cabo su plan-trampa, sin permitir la colaboracin de unas fuerzas isreles ms experimentadas en estas situaciones. Llegados en dos helicpteros, all esperaba el avin comprometido con una tripulacin ficticia de ocho policas disfrazados, as como cinco francotiradores, escasos ante los ocho terroristas. Cuando los secuestradores parecieron alejarse de los helicpteros se inici un largo tiroteo de ms de una hora y en el momento en el que iniciaron los movimientos para tratar de poner a salvo a los rehenes, un terrorista hizo explosionar una granada en unos de los aparatos para matar a cinco de los israeles, mientras un segundo terrorista suba al segundo helicptero y asesinaba a tiros a los otros cuatro. Con tres terroristas capturados, los otros cinco eran abatidos en el intercambio de disparos, en el que tambin muri un polica alemn. Pasada la medianoche se daba por concluida la sangrienta operacin fallida de rescate.
An sobrecogidos por los acontecimientos, el debate se traslad de inmediato a la continuidad o no de los Juegos Olmpicos. Israel, obviamente, no iba a seguir compitiendo y tampoco lo hizo Egipto. A las 10.00 de la maana, un estadio olmpico abarrotado en las gradas y el csped, con ms 85.000 asistentes, se celebraba un homenaje en memoria de los asesinados. All, con todo el mundo pendiente, se despejaron las dudas y el presidente del COI dio un mensaje al mundo de que la barbarie no podra con el movimiento de paz de los Juegos Olmpicos. Pese a algunas retiradas puntuales de deportistas, la peticin de Israel a Estados Unidos para que abandonaran y diversas presiones al gobierno de Alemania Federal para que suspendiera la competicin, a las cuatro de la tarde del 6 de septiembre se reanudaron los Juegos, retrasndose, eso s, del 10 al 11 la clausura de los mismos.
