Pablo Aguilar, ala-pívot de 34 años con una dilatada experiencia en el baloncesto mundial, sigue ganando partidos. Ahora en Japón, con sus Fukuoka Rizing que le tienen la consideración de estrella. Es el capitán y ante los Shiga Lakes dejó un canastón antológico.
Partido empatado a 81 y con ocho décimas en el reloj, Aguilar recibió a pocos centímetros del logo. Le dio tiempo a armar el triple que entró sobre la bocina y significó el triunfo del equipo del extremo norte de la isla Kyushu. Locura en las gradas, compañeros y en el propio comentarista.
Incluso se lo dedicó a uno de sus compañeros de aventuras en su carrera, Sergio Llull. En un tuit colocó las míticas mandarinas. Aguilar, trotamundos con paso en ACB por la cantera del Real Madrid, el primer equipo blanco, Granada, Zaragoa, Valencia Basket, Gran Canaria, Cedevita Zagreb, Pallacanestro Reggiana, Tenerife Burgos y ahora en Japón, y su momentazo.
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