Chus Mateo, el elegido para seguir al frente del Real Madrid

Tras un periodo de alguna tibia duda, de ver cómo se desarrollaban los acontecimientos en la temporada porque el club blanco es implacable en su exigencia, el Real Madrid ha decidido que el entrenador para la próxima temporada es el de la actual: Chus Mateo.

Los responsables de la sección, con Juan Carlos Sánchez a la cabeza, quieren renovar al técnico madrileño, vigente campeón de la Euroliga, y ya han empezado las conversaciones para asegurarse la continuidad del técnico que, de momento, ha ganado todos los títulos que se han jugado en esta temporada (Supercopa y Copa), aspira a su segunda Euroliga consecutiva (para entrar en un selecto club con Gomelsky, Ferrándiz, Nikolic, Sandro Gamba, Maljkovic, Obradovic, Pini Gershon y Ataman y este miércoles inicia los playoffs de la Liga Endesa ante el Gran Canaria en busca de recuperar el cetro liguero.

Entrenador del año en la Euroliga

Chus acaba de ser elegido Entrenador del Año en la Euroliga después de que su equipo hiciera la mejor temporada regular en la historia del torneo con el actual formato (27 victorias y 7 derrotas) y llevó a su equipo a la Final Four con un rotundo 3-0 en el playoff de cuartos ante el Baskonia. Hasta la fecha la campaña europea del Madrid es impecable.

Se daba la paradoja de que el entrenador más exitoso de la temporada en Europa podría presentarse en Berlín para luchar por la Duodécima (del 24 al 26 de mayo) sin conocer su futuro. Su contrato expiraba el 30 de junio. Ahora está más tranquilo al respecto. Nadie sabe cómo terminarán las conversaciones, pero no parece que haya ningún problema para resolver la continuidad del entrenador de 55 años, que cumple su segunda campaña como primer entrenador tras muchas temporadas ligado al club blanco en distintos cargos de la cantera y como técnico ayudante.

El reto de la sucesión

No lo ha tenido nada fácil. El desafío de sustituir a una leyenda de la sección como Pablo Laso era una empresa complicada para cualquiera, pero Chus se ha hecho camino (cuatro títulos, dos Supercopas, una Copa y la Euroliga) mientras dejaba atrás la sombra de su antecesor sin despreciar su legado. El título europeo de la temporada anterior le sirvió para seguir al frente del equipo esta temporada y ahora la intención es no esperar a ver qué suceda en Berlín (le espera el Olympiacos en semifinales y una posible final ante Panathinaikos o Fenerbahce) para reafirmarle en el cargo, aunque tratándose del Madrid, donde la victoria y la derrota lo justifica (y lo tapa) todo, nunca se puede asegurar nada.