Los Warriors tienen nuevo dúo y el estreno no pudo ser mejor ni más entretenido. Stephen Curry ha estado toda la temporada sin Klay Thompson, su socio de toda la vida, pero acaba de llegar Jimmy Butler después de su convulsa y polémica salida de los Heat. La mezcla fue buena en el debut: 59 puntos y 10 asistencias entre los dos para ganar a los Bulls por 111-132 tras una bestial remontada
Butler III (como ponía en la parte de atrás de su camiseta en honor a su padre, fallecido el año pasado) hizo 25 puntos (7/12 en tiros de campo) mientras que Curry se fue a los 34 metiendo ocho triples, igualando su mejor marca de la temporada.
El base vivió uno de sus éxtasis anotadores en el tercer periodo cuando anotó 24 puntos, incluidos cinco triples. De su mano, los Warriors obraron una bestial remontada pasando de perder por 24 (83-59) a ganar por cuatro (93-97) tras un parcial de 10-38. Luego, los Bulls se vinieron abajo y ya no hubo partido. Desde aquella máxima hasta el final, parcial de 28-73.
Polos opuestos
Curry valoró el primer día junto a su nuevo compañero y aseguró que “es exactamente el jugador opuesto a mí. Yo tiré 16 triples y él lanzó uno. Llegó mucho a la línea de tiros libres y dominó la pintura. Yo domino el perímetro. Tiene el potencial de ser muy divertido”. Y la respuesta de Butler fue que “los polos opuestos se atraen en la vida. No creo que yo pueda ser un mejor complemento para él y viceversa. Yo me quedo con el trabajo fácil”.
El entrenador Steve Kerr se mostró muy contento con el debut de Butler: "Es bastante divertido tenerle en nuestro equipo. Es un león. Da confianza al resto del grupo, incluidos Steph y Draymond. Ese es el objetivo del acuerdo, inyectar esa confianza y presencia que aporta Jimmy".
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