La lgica no est invitada 1o2072
domingo, 7 mayo 2017, 11:15
El Atltico gan en un arrebato de Godn como extremo izquierdo. sa, la que de el Atltico y la lgica vuelven a estar en las antpodas, puede ser en clave rojiblanca la buena noticia de cara al mircoles, fecha para la que al fin y al cabo no ha recibido invitacin el sentido comn. Luego est lo de aficin, empeada tambin en hacer que lo imposible vuelva a ser posible. Y hasta ah. Lo que se aprecia sobre el terreno de juego no invita precisamente al optimismo, primero porque tendra que hacer tres goles (como mnimo) un equipo al que le cuesta horrores marcar uno, segundo porque se aprecian evidentes sntomas de fatiga en futbolistas a los que se necesitara frescos. Unos cuantos, adems. Demasiados.
Porque casi ms difcil que imaginar la remontada ante el Real Madrid se antoja imaginar un once rojiblanco sin el mencionado Godn. O sin Filipe. O sin Gabi. O sin Sal. O sin Koke. O sin Griezmann. Y las piernas dan para lo que dan, por mucho que los soldados se apunten a todas las batallas. Simeone volvi a tirar de la tropa en el afn por amarrar ese tercer puesto tan a tiro ahora y que tan lejano pareca hace apenas un par de meses, consciente como era de que el Eibar de Mendilibar iba a ofrecer de todo menos facilidades. Jugaron, sufrieron, se desgastaron... y desde hoy andarn pensando ya en la siguiente escaramuza, que no es una cualquiera. Su da a da, vamos.
Para que ganara el Atltico, regresemos al arranque, tuvo que mediar 'godinada', lase esas dos o tres acciones de cada partido en las que el central recuerda aquel pasado de punta que arrastra y se lanza al ataque como si fuera a regresar en cinta mecnica. Con el aadido en esta ocasin de que ni siquiera lo hizo por el centro, sino que agarr una pelota por el perfil zurdo y se tir vertical hasta levantar la cabeza, aleluya, sigue habiendo quien lo hace, y ponerla en la frontal para que Torres exhibiera su inteligencia, dejndola pasar, y Sal su zurda, incrustndola junto al palo. Para entonces se haba jugado ms de una hora de partido, con la sospecha colectiva, desmentida justo ah, de que no habra modo de embocar en la portera de Yoel. El 8 suele apuntarse el 1-0, buena costumbre sa.
Atendamos a la primera parte ahora, en este vaivn que nos traemos. Carrasco se deshizo de Ramis y se qued mano a mano con Yoel. El propio Sal se la encontr en el punto de penalti despus de que Thomas creara por la derecha. Si quieren, forzando, se puede aadir una de Koke. Tres ocasiones evidentes y no se trata de que el Atltico no marcara, sino de que ni uno ni otro ni el de ms all fueron capaces de orientar sus disparos entre los tres palos. Llegados a este punto, Simeone ni siquiera incluye ya delanteros en sus alineaciones. Total, tanto le da. La referencia ayer era Griezmann, que anda raro las ltimas semanas, pero al que siempre conviene esperar.
El partido, a todo esto, haba comenzado con un error... de transcripcin. El Cholo prob esta semana con Correa, en las alineaciones oficiales apareca Correa, en la que recibimos los de la canallesca Correa era titular... y jug Carrasco. El argentino calentaba con los suplentes sin aparentes problemas, as que, buenas personas como somos, daremos por vlida una explicacin que en todo caso anticipaba una tarde extraa, porque el Atltico andaba mustio y porque el Caldern de primera hora andaba mustio tambin. Calle Melancola.
Con motivos ambos, no ser esta crnica la que los niegue, pero al Eibar tanto le daban. Se plant el equipo armero sobre el pasto y tuvo de hecho la primera, aprovechando Inui la adaptacin de Thomas al lateral, topando Inui con Oblak, para mostrarse a partir de ah como un cuadro firme pero sin excesivas pretensiones, que en todo caso agradeci tanto los errores rojiblancos de cara a puerta antes del descanso como la seguridad de Yoel en disparos lejanos despus. El Atltico, por lo menos, iba ajustando su mirilla. Y en stas apareci Godn y en stas golpe Saul. El resto fue sufrimiento local y protagonismo de Borbaln. De la lgica, ni rastro. Ni falta que hace.