Porca miseria 3l2b3u
martes, 19 septiembre 2017, 10:52
De verdad que no eranecesaria la ltima demostracin.A esas alturasde la noche resultabaya evidente que elAtltico es un gran equipo singol, ms que nada porque lapersonalidad no sube al marcador,pero en la prolongacindel partido an apareci Saldesde atrs para cabecear unservicio de Koke desde la esquina,para que Alisson sacarala ensima mano de la noche(una de las que ms mritotuvo) y para que la pelota quedaramuerta pidiendo a gritosque el 8 la remachara. A gol?No y mil veces no! Solo en elrea pequea, sin oposicinalguna, el rojiblanco puso labota de aquella manera parahacer lo ms difcil, que eraecharla fuera. Tocando palo,para que nada faltara. El Atlticohar goles algn da de estos,pero, por muchos partidosque juegue, no tendr unaocasin ms clara en toda laChampions. Porca miseria.
En realidad, reflexionandosiquiera sea por un momento,se no dejaba de ser eldesenlace lgico para un segundoacto que haba derivadoen monlogo rojiblanco,pero en el que la chavalera seestrell una y otra vez ante elportero romanista o ante supropia inoperancia. Primerola tuvo Vietto en mano a mano,despus el mencionadoSal dentro del rea, luegoThomas desde lejos, ms tardeCorrea tras maniobra sibilina,an Carrasco empeadoen jugar sin compaerosy por fin, antes de la de Sal,otra vez Correa para la ensimaparada de Alisson. Dela Roma no haba rastro, delgol tampoco. Es de suponerque los jugadores locales semiraran perplejos al ingresaren el vestuario decretado el final:hemos empatado estepartido? tenemos los mismos puntos que ellos? Bellssimo.
As de entraable es esteAtltico sin delanteros, sin plvora,sin picante. Con la honrosaexcepcin de Gran Canaria,isla en la que, vaya usteda saber por qu, sucede justolo contrario, el grupo de Simeonesuele merecer muchoms de lo que consigue en loque a la portera rival respecta.Con Griezmann extraviadoa lo largo del verano, conVietto absolutamente lejano acualquier posibilidad de hacercosquillas, con Gameiro yTorres momentneamenteperdidos para la causa, con Correacomo agitador sin premioy con Carrasco a lo suyo, queno es lo de los dems... la coleccinde males es amplia yprovoca, definitivamente, suspirosmelanclicos a la que alguienosa pronunciar el apellido Costa. Hoy mejor quemaana, se ponga la FIFA comose ponga.
Apareci poderoso el Atltico,justo como haba aparecidoen Valencia. Cinco minutosde puesta en escena, paraver si cae alguno, y a plegar velastocan. La tuvo Sal, en jugadainiciada por Vietto y desarrolladapor Filipe, pero eltoque sutil de zurdo se fue alpalo para respiro del Olmpico,para anticipar lo que ibaa suceder despus y para queempezara un nuevo partido,en el que, esta vez s, y aunquefuera durante un rato, enfrentede la escuadra rojiblanca habarival.
La Roma busc las costuras visitantescon cierta paciencia,primero con Bruno Peres y Defrelpercutiendo por la derecha,despus con las aparicionesde Perotti desde el otrocarril o de Nainggolan desdesegunda lnea. Thomas perdiel peso que haba tenido en losprimeros minutos y el Atlticose fue descosiendo, msall de que siempre mantuviera viva la opcin de una contra.Vietto, que pasaba por all,sac la mano a pasear en supropia rea, pero el colegiadolo tuvo claro: imposible castigara quien circula por la vidacon esa cara de buen muchacho.El del argentino, de todoslos relatados ya, puede ser elcaso ms curioso: jugando enpunta tiene mucha ms presenciapara entorpecer la salidarival que para generar peligro.A ver si es defensa y nose ha enterado...
El duelo enloqueci sobre lamedia hora, cuando al Atlticole pillaron a por uvas en unaaccin de laboratorio queNainggolan resolvi con latigazoa duras penas neutralizadopor Oblak, para que en lajugada inmediatamente posteriorManolas sacara bajo paloslo que ya se festejaba comogol de Koke. Otra que apuntaral balance final. Muy poco despusDzeko ech fuera la jugadaque en el ltimo lustro peorcolocada ha debido pillara la zaga del Cholo y ah se firmuna especie de armisticioque dur hasta el descanso.
Lo de despus se ha contadoya, y ni por sas deja de resultarincreble. Es habitual queSal se encargue del primer golen los partidos importantes,as que era l o nadie. Fue nadie.Lo ha hecho tantas veces,por lo dems, que a nadie se leocurrir reproche personal alguno.Por si hubiera alguna duda,a todo esto, su despliegueresult hasta emocionante, especialmentecuando en los ltimosminutos pele cada centmetrode csped mientrasalguno que acababa de ingresardisimulaba silbando.
Porque tambin desde elbanquillo se busc el partido,primero con Correa, luego conYannick, por fin con Gaitn.El Atltico, que fue mucho mejorque una Roma absolutamenteen construccin, porresumir, apenas rasc un empateque sin contexto hasta podraresultar positivo, pero quecon l se antoja catastrfico.Palo de Sal al principio, palode Sal al final. Capica. El imperiocaer algn da, pero noser con balas de fogueo.