Carrasco - Hermoso: Sociedad de éxito

Si en los primeros meses de este 2020 alguien habla de una sociedad triunfal en clave rojiblanca entre Carrasco y Hermoso le habrían, habríamos, tildado de loco. Ni el belga, que llegó en enero para una cesión inesperada. Ni el madrileño, que lo hizo en verano de 2019 para hacer de Lucas pero que tuvo un primer año muy complicado, tenían un papel importante en la rotación rojiblanca. Más bien, al contrario. Carne de banquillo en multitud de ocasiones. Por poner un ejemplo, ninguno de los dos (Hermoso estaba lesionado en la vuelta) participó ni un minuto en los 210 que duró el histórico doble choque ante el Liverpool de los meses de febrero y marzo.

Nueve meses después la realidad de ambos ha dado un giro de 180 grados. Hermoso se ha convertido en un seguro en el área propia... y una amenaza en el rival. Carrasco lleva meses siendo una baza ofensiva imparable (por lo que genera en el juego y mata en el área) y un gran lanzador a balón parado como hacía años que no tenían los rojiblancos.

Juntos, no podía ser de otra manera, han formado una sociedad que volvió a emerger ante la Real Sociedad para marcar el 0-1 tras un esférico perfecto de Carrasco que mandó a la jaula Hermoso con un cabezazo tan bueno como limpio en cuanto a la ausencia de oposición. Algo que ya había pasado antes. En concreto ante el Salzburgo en el encuentro en el que los rojiblancos se jugaron el pase a los octavos de la Champions.

Aquel día, cuando más apretaba el conjunto austriaco buscando la victoria que les daba el pase, aparecieron en la misma jugada para poner también el primero de los dos goles de la victoria. Un centro tocadito del belga... un remate (aunque más con el hombro) del ex del Espanyol. Una sociedad, en definitiva, que le ha dado al Atlético dos triunfos vitales. Da igual Champions, para meterse entre los 16 mejores, o LaLiga, para auparse más todavía al primer puesto en la clasificación.

El Cholo lo pedía...

Antes de estos dos goles a balón parado, curiosamente, Simeone habló de la falta de acierto del equipo en una suerte, la del balón parado, que le ha dado muchos réditos a su Atlético. Los futbolistas rojiblancos se pusieron manos a la obra para acabar con la mala racha con dos goles que han dado dos triunfos vitales gracias a la sociedad Carrasco-Hermoso, tan brillante como inesperada.