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Se presentó el Atlético anoche en el Reale Arena con una defensa inédita. Realmente, lo hacía con los únicos cuatro defensores disponibles para el partido. Vrsaljko, Felipe, Hermoso y Lodi. Con Trippier en Inglaterra hace ya dos semanas, Llorente y Savic lesionados y Giménez sancionado tras su expulsión en la Supercopa, el Cholo no tenía ni para elegir. Y por ese agujero es por donde el equipo se desangró. Por ese agujero es por donde se desangra.
Sin alardes en ninguna otra parcela del campo, los rojiblancos, ayer de rojo, hicieron aguas una vez más en su gran asignatura pendiente, los centros laterales. Tres defensores fueron incapaces de ganar el salto a Januzaj y el belga se encargó de adelantar a los suyos. Para colmo, antes de acabar la primera parte, los dos centrales colchoneros habían visto tarjeta por dos faltas a kilómetros de su portería. La noche comenzó a torcerse y ya no habría opción de enderezarla, cada minuto parecía peor.
El Atlético se ha quedado sin defensa y lo ha hecho en el peor momento. Con Supercopa y Copa del Rey en juego, los de Simeone han tenido que volver a afrontar partidos claves sin Giménez y Savic. Durante años, cuando el resto de líneas no respondían, la zaga se encargaba de solucionar los problemas. Ahora, es una pesadilla. Y para muestra la acción del segundo gol donostiarra. Hermoso cedió a Felipe que se hizo un lío dejando a Sorloth solo ante Oblak. En ese momento el partido para los de Simeone se acabó. Cada segundo que pasaba sobre el campo era un tormento para un equipo que ha perdido por completo cualquier rasgo de lo que le hizo competir durante años.
Un equipo sin alma
No sólo de defender ha vivido el Atlético de Simeone durante esta década, era un equipo reconocible, con espíritu. Podía ser inferior pero nunca dejaba de competir. Ahora, el equipo deambula por el campo sin dar la sensación de creer en lo que hacen. El nerviosismo atrás se ha extendido por todo el equipo. Sólo hay que ver a Felipe y Hermoso para comprobar que el Atlético atraviesa un estado de nervios que le tiene bloqueado. De las diez derrotas colchoneras, nueve de ellas les tuvieron a ambos de protagonistas en el once titular
La Copa del Rey se convirtió en un nuevo drama para los de Simeone. Sin Giménez, sin Savic... los rojiblancos se han quedado sin defensa. A pensar en LaLiga y salvar un puesto en Champions. El Valencia, primera final.