Nadie contaba con que el Atlético aspirara a la segunda plaza que ostentaba el Real Madrid cuando LaLiga echó el freno tras 14 encuentros para dar paso al Mundial en pleno mes de noviembre. Mucho menos, cuando al inicio de 2023, tras la derrota en casa contra el Barcelona y el empate en Almería de la jornada 17 del 13 de enero, la distancia respecto al eterno rival se disparaba hasta los 13. Sin embargo, renovado y fortalecido el vestuario tras el mercado invernal, los de Simeone volverían a su esencia, agarrados al partido a partido, para iniciar una espectacular remontada que sólo ha necesitado 14 partidos para culminar en un soro frente al vecino de la capital. El subcampeonato que para muchos era una quimera cuando los rojiblancos se fueron a Qatar en la quinta plaza, es hoy una realidad.
Cinco jornadas más acabarán de dictaminar si el Atlético defiende la plaza arrebatada este miércoles al Real Madrid, si bien tanto el modo apisonadora en el que han mutado los del Cholo (han firmado 13 victorias, dos polémicos empates frente a Getafe y en el Bernabéu y una única derrota en el Camp Nou desde aquel 1-1 en Almería) como los compromisos en Copa y Champions que pueden llevar a la distracción a los blancos, invitan al optimismo.
Una gesta que no por repetida deja de tener su importancia, pues sería la quinta ocasión en las 11 ocasiones en que Simeone habría dirigido una temporada completa al Atlético en que finalizaría por delante del laureado club de la Castellana, incluyendo las dos Ligas conquistadas en este tiempo.
Un objetivo 'rutinario'
En una rutina mucho mayor ha convertido El Cholo la clasificación para la Champions, objetivo que ha cumplido sistemáticamente desde su llegada (sus únicos seis meses de su aterrizaje al margen). Los tres o cuatro billetes a la élite continental que le exigirían desde los despachos del Metropolitano han tornado en una cita puntual con la flor y nata de Europa, pues a falta de 15 puntos por disputarse es la distancia con la que el Atlético aventaja al quinto, acariciando así virtualmente un encargo que será matemático con un punto más.
