Lo de Oriol Romeu con el Barcelona ha sido un viaje de ida y vuelta, aunque nada sencillo. Hace un par de años él mismo dudaba de su capacidad para acabar jugando en el Barça y resulta que ha terminado siendo el elegido para relevar a una leyenda como Sergio Busquets en el centro del campo azulgrana.
Ser la apuesta de Xavi -aunque no haya sido la primera- para ocupar esa posición no hará perder la cabeza al de Ulldecona. Hace mucho que tiene los pies en el suelo. Quizás desde aquel día en el que, con 20 años, coincidió con el Chelsea con Juan Mata y el asturiano le preguntó por qué llevaba unos pantalones de 300 euros. Aquello hizo pensar al joven Oriol, que desde entonces se ha propuesto como objetivo gastar menos dinero cada año.
Oriol Romeu disputa un balón en el Benito VillamarínKIKO HURTADO
También ha ayudado el camino que Romeu ha recorrido en todo este tiempo. Desde que Pep Guardiola le dio la alernativa en el primer equipo del Barça, hace ahora 12 años, el de Ulldecona ha pasado mucho. En ese tiempo, el de Ulldecona ha podido conocer de primera mano lo dulce y lo amargo de este deporte.
Dulce, como cuando se proclamó campeón de Europa con el Chelsea o se convirtió en capitán general en el Southampton o el Girona. Amargo, como su paso por el Valencia, o el Stuttgart o la rotura de cruzado que sufrió en su segundo año de blue.
Oriol Romeu con el balón en posesión vistiendo la elástica del SouthamptonA.P.
Todas esas experiencias han ido imprimiendo en él un carácter particular. Algo que Xavi quiere tanto como su fútbol. Su conocimiento de la casa, del juego y de lo que el egarense espera de él -han sido compañeros de equipo- deben ser una ventaja y ayudarle a tener una adaptación inmediata al equipo.
También tiene que notarse el haber pasado por las manos de varios de los mejores entrenadores del mundo. Mourinho, Guardiola, Luis Enrique o Koeman son algunos de los técnicos que han dirigido a Oriol a lo largo de su carrera. Ahora le toca el turno a Xavi, al que muchos -con demasiada prisa- intentan meter desde el primer día en ese selecto club.
Pep Guardiola charlando con Oriol RomeuSC ADELANTADO
Todavía está por ver si se acaba haciendo con el puesto de pivote en exclusividad o si, en cambio, acaba alternándose en esa posición con Frenkie de Jong. Hace unas semanas esa parecía una opción que Xavi tenía descartada, pero habrá que ver cómo transcurre la temporada.
Aventura en el filial
Llegado el caso, no da la impresión de que Romeu vaya a poner el grito en el cielo si se ve falto de minutos. En este momento de su carrera y sabiendo en el club que está, sabe que es algo que puede suceder.
Lejos queda ya aquella época en la que pidió al entrenador del Southampton que le dejara jugar con el filial porque quería jugar. "Para estar en el banquillo, me voy al segundo equipo", le dijo. Claro, que en aquel entonces lo de volver al Barcelona parecía quedar muy lejos.
