La Federación Italiana de Fútbol (FIGC) está investigando aNicolo Zaniolo, jugador de la Fiorentina al que la Roma acusa de haber provocado una pelea en los vestuarios de Viola-Park con canteranos romanistas tras el partido entre ambos equipos del campeonato Primavera en el que se enfrentan los filiales de los equipos de la Serie A y que ganó 1-2 el equipo 'viola'.
Lamentablemente, uno de ellos me provocó verbalmente y perdí la calma
La denuncia de la Roma contra su exjugador Zaniolo
La Roma acusa a su exjugador Zaniolo de provocaciones en el vestuario 'giallorosso' y de agredir a dos de sus futbolistas.
Zaniolo orinó en las instalaciones reservadas a la Roma, provocó a los jugadores y, sin ningún intercambio verbal, golpeó físicamente a Mattia Almaviva y empujó violentamente a Marco Litti
"Nicolo Zaniolo (jugador del primer equipo de la Fiorentina) irrumpió ilegalmente en el vestuario de la Roma, acompañado de un conocido, a pesar de no tener acreditación. Según testigos, Zaniolo parecía visiblemente alterado. Orinó en las instalaciones reservadas a la Roma, provocó a los jugadores y, sin ningún intercambio verbal, golpeó físicamente a Mattia Almaviva y empujó violentamente a Marco Litti contra un banquillo. Litti se estaba recuperando de una cirugía de hombro. Ambos jugadores fueron hospitalizados: Almaviva recibió un pronóstico de 10 días, Litti, 21 días", informó la Roma en un comunicado que reproduce el diario 'La Gazzetta dello Sport'.
Zaniolo asegura que "empezaron a insultarme" y reconoce que "reaccioné mal y asumo mi responsabilidad"
La Fiorentina desmiente la versión de la Roma y sostiene que Zaniolo, que es propiedad del Galatasaray, explicó que "al final del partido, bajé al vestuario para felicitar a los chicos del Fiorentina y luego fui al vestuario del Roma para saludarlos y felicitarlos por la temporada, pero en un momento empezaron a insultarme, así que, para evitar que la situación se agravara, preferí irme".
"Quiero pedir perdón por lo sucedido. Sé que reaccioné mal y asumo mi responsabilidad. Fui al vestuario con el objetivo de dar apoyo a los chicos (Roma) en un momento complicado tras la derrota. Lamentablemente, uno de ellos me provocó verbalmente y perdí la calma", apuntó el futbolista italiano de 25 años.
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