El entrenador de Osasuna, Jagoba Arrasate, se va a convertir en Vallecas en un técnico centenario con el conjunto rojillo en la máxima categoría. El míster vizcaíno, que cumple su cuarta temporada en Pamplona, alcanza así unas cifras complicadas de alcanzar en un mismo club en el fútbol español hoy día. El balance está muy equilibrado, casi a tercios, con: 31 victorias, 32 empates y 36 derrotas.
No obstante, el técnico de Osasuna aparca cualquier celebración de semejante efeméride para centrarse en su objetivo principal, que no es otro que alcanzar o superar la treintena de puntos en la clasificación para continuar acercándose a la permanencia por tercer año consecutivo: "Es tocar con las manos, prácticamente el objetivo. Lo hemos pasado muy mal. Todos los sabemos. Ahora estamos algo mejor pero tenemos un calendario complicadísimo", advirtió Arrasate en la previa del encuentro frente al Rayo Vallecano.
Osasuna ha tenido toda la semana para preparar su visita al tercer mejor local de la Primera división. Todo lo contrario que el conjunto de Iraola, más pendiente de la semifinal de la Copa del Rey y que apenas ha podido preparar el choque ante los navarros: "Más allá del tute que llevan, nos fijamos en los números que tienen en casa: 26 puntos en casa, con veinte goles a favor y cinco en contra. Son números extraordinarios y eso indica la dificultad que tenemos mañana", destacó el vizcaíno.
Los rojillos doblegaron al Rayo en el partido de la primera vuelta gracias a un gol en el añadido de Manu Sánchez que supuso la primera victoria navarra en el estadio de El Sadar: "Va a ser diferente. Un partido de ida y vuelta. Ellos son eléctricos y muy verticales. Habrá alternativas", vaticinó.
Sin renovar
Arrasate acaba contrato en junio. Club y técnico no piensan abordar la prórroga de la vinculación hasta que el objetivo de la permanencia esté conseguido. El presidente de Osasuna, Luis Sabalza, ya anunció su deseo de seguir contando con el míster de Berriatua en su proyecto una vez fue proclamado, a finales de 2021, como máximo mandatario para los próximos cuatro años. Sin embargo, las negociaciones han quedado aparcadas por deseo del propio Arrasate. Tanto él como el director deportivo no han escondido el "desgaste" que supondría una quinta temporada al frente del banquillo rojillo con lo que ya han adelantado que tendrían que tratar varios temas de especial relevancia en cuanto, por ejemplo, la confección de la próxima plantilla.