Kepa Arrizabalaga tiene todos los números para ser el portero titular del Real Madrid este viernes en Vigo. Carlo Ancelotti apostó por Andrey Lunin en Almería, pues el vasco acababa de formalizar su cesión al club blanco apenas unos días antes y sólo sumaba tres entrenamientos antes del viaje a Andalucía. Serán ya siete sesiones antes del viaje a Vigo del próximo viernes, un bagaje que parece suficiente para dar la alternativa al portero elegido para suplir al lesionado Courtois, por más que Lunin conservara la plaza de titular por aquello de los códigos de vestuario que tan bien maneja el entrenador del Madrid.
En Valdebebas andan encantados con el trabajo de Kepa en sus primeros días de blanco. Su tono físico y su nivel técnico están a la altura de lo esperado en el que en su día (2018) estableció el récord de portero más caro del mundo tras su fichaje por el Chelsea procedente del Athletic, por 80 millones de euros. Una operación que disipó los intensos rumores, que estuvieron muy cerca de plasmarse en realidad, sobre el interés del Madrid por el portero apenas medio año antes.
Kepa ya se entrena con el Real Madrid
Kepa tenía entonces una cláusula de sólo 20 millones de euros y contaba con el OK de la dirección deportiva del Madrid, pero Zinedine Zidane se negó en redondo a dar luz verde a un fichaje que parecía seguro en el mercado de invierno de la 17-18. Kepa pasó incluso un reconocimiento médico en Madrid, pero finalmente el club decidió respetar la decisión de Zidane, que no quiso alterar el ecosistema de la portería blanca, defendida entonces por Keylor Navas y con Kiko Casilla como segundo.
Kepa: "Vengo cedido pero ojalá pueda quedarme"
Desde ese invierno de 2017 hasta este verano de 2023 han pasado cinco años y medio, que han vuelto a reunir los caminos del Madrid y Kepa. Una historia en la que hay otro protagonista, que no es otro que Courtois. El belga firmó por el Madrid el mismo día que el vasco llegaba al Chelsea (8 de agosto de 2018), y ahora ha sido la grave lesión del primero la que ha abierto las puertas de Valdebebas al segundo. Un pulso que puede tener continuidad si Kepa responde a las expectativas y logra que la cesión que le ha llevado a Madrid este verano cristalice en un traspaso desde el Chelsea, con el que tiene contrato hasta 2025.
La apuesta del portero de Ondarroa es firme, ya que rechazó un contrato plurianual con un gigante como el Bayern del Múnich por un año prácticamente 'a prueba' en el Madrid. El club blanco sigue confiando en recuperar la mejor versión de Courtois, pero para eso queda un mundo. Alrededor de siete meses en los que Kepa debe ganarse la confianza de la entidad. Empezando por el partido de este viernes en Balaídos, escenario probable del debut en diferido del ex del Athletic como madridista.
