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Arda Güler se quedó sin debut. Por segundo partido consecutivo, el turco vio los 90 minutos desde el banquillo, aunque el caso del Sporting de Braga fue distinto al del Rayo. En Liga, con el partido apretado y en su primera convocatoria, era difícil pensar que Ancelotti le pudiera dar la alternativa. Pero en Champions, con un 3-0 en el marcador a falta de 30 minutos y el Bernabéu listo para dar la bienvenida a su última perla, su ausencia se entendió menos.
Ancelotti, que repartió abrazos a diestro y siniestro durante la noche (a Rodrygo tras su gol, a Brahim en el cambio), se acercó a Arda Güler tras el encuentro y mantuvo con él una breve charla en buen tono, con confidencias al oído y abrazos al joven turco en actitud paternal, con el resto del cuerpo técnico muy atento a la pareja. Llopis, Davide Ancelotti... el centro de atención mientras los jugadores que sí habían jugado se despedían de la afición estaba cerca del túnel de vestuarios.
"Estamos teniendo cuidado con él. Ha empezado a entrenar después de una lesión muy larga. Tendrá su tiempo cuando esté al 100%", dijo Ancelotti en rueda de prensa para justificar la ausencia de Güler en el partido.
Arda tendrá que esperar al sábado y aprenderse el dicho de que a la tercera va la vencida. Será de nuevo en el Bernabéu, con el Valencia como rival, cuando el turco se vuelva a sentar detrás de Ancelotti soñando con el momento en el que su entrenador gire la cabeza, le mire y le diga: "Te toca".