El Levante pasa el rodillo del Ciutat y se gusta ante un endeble Zaragoza

Demostrando que el Ciutat de Valencia es un fortín inexpugnable, quinta victoria seguida ante su afición, y aprovechando varios errores defensivos rivales, el Levante pasó el rodillo ante un endeble Real Zaragoza y se sitúa como líder provisional a la espera del partido del Elche. Los valencianos ya pusieron tierra de por medio en los primeros 12 minutos gracias a los goles de Carlos Álvarez y Forés. Tras el descanso, Morales sentenció el envite y, con el choque visto para sentencia, el partido entró en un festival de goles en el tramo final: Carlos Espí anotó el cuarto, Pau Sans hizo el primero visitante, Iván Romero marcó el quinto local de penalti y Soberón logró el segundo para los maños, que siguen fuera del descenso pese a firmar un pobre balance de un triunfo en los últimos dos meses y medio.

El Levante aterrizó en el partido de manera arrolladora. Apretando en campo contrario y muy pronto consiguió el premio. Tras un robo en campo propio de Pampín, Carlos Álvarez inició una gran acción ofensiva, entregó el esférico a Morales, que después de una bonita jugada individual, centró y el propio '24' azulgrana con un cabezazo anotó el primero. Sin tiempo para digerirlo, los de Gabi se vieron sorprendidos con el segundo tanto. Tras un error entre los centrales y la mala salida de Poussin, Álex Forés marcó a puerta vacía con una gran vaselina. Después del gran inicio de los de Julián Calero, el Real Zaragoza empezó a asomarse en el área local, aunque ni Bazdar, que falló a puerta vacía tras un error en la entrega de Oriol Rey, ni Adu Ares estuvieron acertados. A pesar de ello, Poussin evitó el tercero de los valencianos con un paradón a un cabezazo a bocajarro del propio Álex Forés.

Con dos cambios en el descanso, el Zaragoza salió con fuerza y Raúl Guti estuvo a punto de apretar el marcador muy pronto, pero su derechazo salió rozando el poste. Y de lo que pudo ser 2-1 al 3-0, ya que Morales no perdonó y marcó tras regatear a Poussin aprovechando un fallo de Jair en el despeje. Tras el tercer tanto, los locales controlaron el ritmo del partido aunque el Zaragoza tuvo en varias ocasiones el gol, pero pagó la falta de puntería ante el gran trabajo de Andrés Fernández.

Brugué perdonó el cuarto de los granotas al cabecear alto una falta de Carlos Álvarez, pero el que no lo hizo fue Carlos Espí, que poco después de entrar al campo cabeceó cruzado un buen centro de Pampín para aumentar el marcador. Era el minuto 85, pero aún faltaban goles. De hecho Pau Sans hizo el primer gol maño al rematar de cabeza el centro de Adu Ares. Justo después Iván Romero aprovechó el penalti señalado a Tasende por derribar a Carlos Espí para poner el 5-1 que no sería definitivo, ya que antes del pitido final el Zaragoza anotó su segundo gol al remachar Soberón el córner de Aketxe cabeceado por Jair.