Tecatito Corona no quiere abandonar el Sevilla. Sin embargo, para el club andaluz su adiós supondría un salvavidas en este final del mercado, posibilitando un espacio salarial para inscribir hasta a dos jugadores, con el fichaje de un y el mediocentro Soumaré como prioridades. Por eso mismo, la negociación con Rayados de Monterrey nunca se ha roto del todo, apurando la vía mexicana para ver si finalmente el jugador da un paso al lado y acepta regresar a su país. Tecatito se descolgó con una propuesta inalcanzable en lo económico para el club de México. Aun así, siguen hablando. Y el Sevilla insiste a su entorno en que en Nervión no gozará de protagonismo y será lo mejor para todas las partes.
Porque Tecatito tiene uno de los salarios más altos que abona el Sevilla, también con una amortización pendiente. Estarían dispuestos en Nervión a rebajar en algo sus pretensiones iniciales con tal de que el jugador saliese en estos dos días y medio que restan para el final del mercado. Les urge una buena venta, mientras que la de Ocampos se ha paralizado, es decir, se ha caído con el poco tiempo que resta de mercado. El argentino no se ha sentido realmente valorado por un Fulham cuya propuesta personal al extremo ha sido decepcionante. No ha superado lo que percibe en Nervión. Lo que parecía un salvavidas arriesgado es una nueva mano al cuello de la planificación.
Sólo Januzaj tiene las maletas preparadas para regresar al Istanbul Basaksehir como cedido. Una operación que no beneficia al Sevilla, pero que le quita un jugador sin propuestas y que penaliza igualmente el límite salarial. Se ha priorizado el poco ahorro de los dos kilos limpios que percibe. O sale algún jugador de calado, o el Sevilla tiene las manos atadas en el mercado. Y se le termina el tiempo a Víctor Orta. Apenas le queda. Todo pendiente de una salida. Si no es Ocampos, los ojos se van ahora hacia el Tecatito Corona. El mexicano es la desesperada llave del mercado sevillista.
