Phil Mickelson tuvo un dichoso debut en el Champions Tour, el Circuito reservado para mayores de 50 años, que juega con asiduidad Miguel Ángel Jiménez. El zurdo estadounidense firmó 61 golpes que le colocaron en el liderato del Charles Schawb Series, torneo de tres días creado tras la pandemia, que se celebra en el Ozarks National (Misouri), en las proximidades del escenario que da nombre a la popular serie de Netflix.
Privado de la posibilidad de seguir jugando los playoffs al no pasar el corte en The Northern Trust, Phil decidió apuntarse a esta opción que tiene desde que en junio cumplió 50 años y lo explotó al máximo. Quiere llegar en óptimas condiciones a Winged Foot, el escenario del US Open, que se disputa del 17 al 20 de septiembre. Firmó 11 birdies y un bogey -en un par 5-, con cinco aciertos consecutivos en los últimos seis hoyos. Aventaja en un golpe al australiano David McKenzie. Miguel Ángel Jiménez jugó en 72 golpes.
El golfista que en 1991, en el sexto torneo profesional, aún como amateur, se impuso en el Tucson Open no quiere esperar tanto en esta nueva etapa en un circuito que este año ha visto como otros debutantes ganaban, caso de Jim Furyk -lo hizo en su primer torneo- y Ernie Els. "Estaba un poco nervioso al principio", expresó Phil. "Son muchas las expectativas que hay sobre mí. Si gano dirán, bueno, era lo normal. Pero si no lo hago, me preguntarán: ¿Qué te pasó?".
El nivel del Champions Tour se ha elevado extremadamente. Además de que la media de golpes del circuito está en sólo 71,09, Fred Couples lidera la estadística de promedio de golpes con 68,26. En 1988, cuando Mickelson se hizo profesional, la media de golpes del circuito era de 73,57 y el mejor era Bob Charles, con 70,05. Además, sigue siendo un buen lugar para un retiro dorado: Bernhard Langer ha ganado 29,5 millones de dólares, tres millones más que lo que ha ganado Ian Poulter en el PGA Tour, por ejemplo.
Comentarios