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París 2024 es un aliciente extraordinario para el boxeador Rafael Lozano hijo, que afronta la cita olímpica alentado por la repercusión del propio evento pero también por la exigencia que se impone como sucesor de su padre, doble medallista en unos Juegos, ahora seleccionador, que fue plata en Sídney 2000 y bronce en Atlanta 1996.
"Estoy disfrutando mucho. Y al lado de mi padre más aún; es una experiencia muy bonita y al lado de mi referente y de la persona que más quiero más aún. es una experiencia muy grande", dijo Rafa Lozano en la puesta en escena oficial del equipo de boxeo de España que disputará París 2024.
No supone presión alguna para el púgil que su padre sea una de las grandes estrellas del deporte español en esta modalidad. "Me motiva más que mi padre haya conseguido dos medallas. Es una motivación. Delante de mi padre me gustaría más aún tener éxito", dijo.
Rafa Lozano no tiene problema de peso a pesar de la variedad de alimentación de la Villa Olímpica. "Desde que terminé el clasificatorio de Tailandia estoy bien de peso. Estoy centrado en eso. Puedo dar el peso mañana mismo. Se refleja así el trabajo que hemos hecho. Vamos a por la victoria", afirmó el boxeador español, que confía en lograr un premio en París.
"Opción a medalla tenemos todos. Se reflejará en el ring. Estamos al nivel de los mejores y deseamos que todos puedan ver el trabajo que hay detrás", destacó Rafa Lozano.
Al boxeo se gana con calcetines
Los calcetines se han convertido en el amuleto del equipo español de boxeo, en el que sus diferentes componentes confesaron que esa prenda cobra para ellos un interés especial: "No me los quito porque tienen el sudor de la victoria", afirmó el boxeador Enmanuel Reyes Pla, quinto en Tokio en la categoría de 91 kilos y que llega con elevadas ambiciones a París.
Rafa Lozano, por su parte, afirmó que centrarse en este tipo de detalles le permite mantener la concentración en la competición: "Lo mío con los calcetines es más mental que otra cosa. Los uso y si gano ya no me los quito. Son manías", afirmó. Además de a los calcetines, los boxeadores tienen que mirar con mucha atención a su alimentación, porque el peso es esencial en su deporte, lo que les obliga a una particular disciplina en una Villa Olímpica en la que tienen mucha variedad de comida.
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