En la noche en que no sonó el 'The Star Spangled', el himno de EE.UU., silencio que es música celestial para los oídos de Cate Campbell, la nadadora 'hater' australiana que provoca al otro bando, Mollie O'Callagham también provocó un terremoto en las filas de la natación de su país.
La velocista se impuso en la final que cerraba la sesión, los 200 libre por delante de Ariarne Titmus, ahogando los deseos de doblete de la campeona de 400, que ahora para trascender tendrá que acudir al escalón superior, los 800, donde Katie Ledecky se siente siempre más cómoda.
En otra carrera rápida, aunque no tanto como la de los trials de hace mes y medio cuando las dos nadadoras lo hicieron por debajo del récord del mundo con victoria de Titmus, Mollie fue protagonista de una remontada para arrojar un récord olímpico (1:53.27), que anulaba el que consiguió su rival en Tokio. La campeona se impuso por 54 centésimas, relegando las dos al tercer puesto a la nadadora de Hong Kong Siobhan Haughey, que había mandado durante tres largos. Dean Boxall, el volcánico entrenador de melena rubia desordenada, tiene trabajo. Sabedor que tiene dos hembras alfa, las mantiene separadas en la piscina y ellas guardan la compostura.
Fue la jornada del lifting en la natación. Tres de los cinco campeones no han cumplido los 20 años. No hubo sorpresa en los 400 estilos con Summer McIntosh, la sensación canadiense de 17 años, sacando 5.69 (4:27.71) a Katie Grimes. Emma Weyant completó el podio para seguir sumando medallas para las estadounidenses aunque no sean de oro. Es una prueba que en Los Ángeles 2028 cumplirá 40 años sin victorias de esa natación. Desde Janet Evans en Seúl 88.
Tampoco en los 100 braza, el combinado americano logró defender la corona. Con Lily King en la cuesta abajo, la sudafricana Tatiana Smith (1:05.28), que tiene el récord olímpico, pero le faltaba la medalla de oro, superó en un bárbaro final a la china Qiating Tang (1:05.54). La irlandesa Mona McSharry, que parecía la vencedora, fue tercera con 1:05.59.
Más apretado aún resultaron los 200 libre. El joven misil rumano David Popovici (1:45.63) ganó por dos centésimas al británico Matthew Richards y por siete al estadounidense Luke Hobson anunciando un duelo que va durar en el futuro. Entre los tres suman 61 años. El cuarto Duncan Scott se quedó a 15 centésimas del campeón en la final más apretada de la historia en esta prueba.
