- 24 Horas de Le Mans 2023. Ferrari derroca a Toyota y Albert Costa se corona en Le Mans
Albert Costa era uno de los hombres más felices, si no el que más, de entre los más de 300.000 espectadores que poblaban el circuito de La Sarthe este domingo a las 16:00 horas. Pero el catalán había logrado la gran victoria que le faltaba: nada menos que en las 24 Horas de Le Mans, en la edición del Centenario y con todo, teóricamente, en contra.
Porque salía muy retrasado en parrilla (13º), se enfrentaba a los gigantes de la categoría en inferioridad de condiciones técnicas y de presupuesto y en una pista en la que no tenía experiencia, un aspecto clave en una carrera como esta y de la que sí disfrutaban muchos de sus rivales.
Convencido de sus opciones desde el principio
Sin embargo, todo se dio la vuelta en apenas unas horas: "Pero cuando hice las primeras vueltas sentí que el coche era bueno... podíamos pensar en algo grande, pero quizá no tan grande. Para mí un podio habría sido increíble también, pero... ha sucedido esto". Pronto su equipo, el Inter Europol, se puso en cabeza, en situación al menos de soñar con el triunfo, sacando el máximo partido del caos inicial con la lluvia y también con suerte, porque el catalán tuvo varios toques sin consecuencias que no dañaron el coche, pero estuvo cerca.
Costa y sus compañeros (el suizo Fabio Scherer y el polaco ) lograron, en el momento más oportuno, el éxito que habían acariciado pero no habían acabado de rematar esta temporada. Pero ni siquiera en las mejores expectactivas del catalán cabía la victoria: "Cuando hice el podio en Spa pensé, bueno, el podio aquí está muy bien pero Le Mans es demasiado grande para nosotros. No tengo palabras, desde pequeño seguía esta carrera y soñaba con estar corriéndola alguna vez. He trabajdo muy duro para esto y mira... el primer año, al primer intento y hemos ganado".
Una victoria que tuvieron que pelear hasta el último momento, sorteando una serie de problemas que pusieron mucha tensión en los minutos finales, como una puerta que no encajaba bien, la imposibilidad de hacer el relevo final para no exceder el tiempo máximo, la lesión del encargado de esa misión (que cojeaba ostensiblemente porque el Corvette de GT le machacó el pie en boxes)... y un fallo de la radio en los dos últimos stints.
"No teníamos radio y como tenemos este mono von colores tan llamativos (amarillo y verde) salí al muro porque pensé que me vería mejor. Como me dio ráfagas, entendí que mi compañero sabía lo que estaba haciendo", explicaba orgulloso.
Como García y Jordi Gené
Costa sube a lo más alto del podio en la categoría intermedia, algo que recientemente solo logró Jordi Gené en 2001, cuando la categoría se denominaba LMP 675 y agranda la lista de éxitos de los pilotos españoles en las clases complementarias en ausencia del tricampeón en GT, Antonio García.