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Con cuatro Dakar a sus espaldas, Lorenzo Santolino (Sherco) ya es uno de los grandes de la carrera. Le costó dos intentos baldíos terminar su primer rally pero cuando lo logró lo hizo en un sobresaliente sexto puesto. El año pasado terminó 11º penalizado por un cambio de motor en las etapas finales que le impidió completar otro top ten.
Ahora, tras completar un 2022 intenso (ha competido, además de en el Dakar, en Abu Dhabi, Marruecos, Andalucía y la Baja Aragón) llega en perfectas condiciones al Dakar, tanto físicas como técnicas, con una Sherco con algunas mejoras (especialmente en el cambio, totalmente nuevo) y una puesta a punto afinada en las últimas tres semanas en un stage final en Marruecos.
Mirando al top 5
Por ello, el objetivo no puede ser otro que mejorar ese sexto puesto, aunque sea una meta realmente complicada teniendo en cuenta el altísimo nivel de pilotos oficiales de la categoría (tres Honda, tres KTM, dos Husqvarna, dos GasGas y cuatro Hero, además de las Sherco).
"Me gustaría mejorar el sexto de 2021. El año pasado estábamos bien posicionados para lograrlo, incluso no muy lejos de la cabeza. Sería bonito estar de nuevo ahí". Es el deseo del salmantino, que para ello se va a mantener fiel a esa regularidad que siempre le ha caracterizado desde su debut en 2019.
"Me gustaría estar en el top 5, sería un súper resultado. Incluso estar en el top 10 sería muy positivo para el equipo". Un reto importante teniendo en cuenta de que la Sherco está un poco por debajo de las motos dominadoras de la categoría: "Nos hemos acercado a KTM y Honda, pero aún nos falta un puntito. Sherco es una marca joven y con menos potencial económico, por eso en algunos puntos, como la electrónica, que requieren de más inversiones, estamos un poquito por detrás".
La general antes que las etapas
El salmantino no cambiará el planteamiento que siempre sigue en el Dakar para lograr ese reto: mantenerse siempre en posiciones de cabeza, pero sin exponerse a abrir pista. "La clave va a estar en quien cometa menos errores y cómo los superes. Hay que se constante y no fallar".
"Si buscara como objetivo ganar una etapa podríamos lograrlo, pero nuestras miras están más en el resultado final. No me beneficia entrar en el juego de las etapas porque hay que tomar riesgos extra. Se podría conseguir sí, o al menos estar cerca, pero mi estrategia no es esa", explicaba.
A partir de ahí, Santolino buscará aprovechar la primera semana, la que mejor se adapta a sus cualidades (sus orígenes están en el enduro) para llegar bien colocado a una segunda semana más dura. "Hay que hacer bien la primera para llegar colocado a la segunda, que será dura físicamente con las dunas tan grandes que hay en el Empty Quarter. Tiene pinta de que este Dakar va a ser el más duro de todos los que se han disputado en Arabia".
Dudas sobre las bonificaciones
Una de las grandes novedades del año en la categoría de motos será el estreno de las bonificaciones para los pilotos que abran pista durante más tiempo, una situación que normalmente es perjudicial para el que la sufre.
Santolino, dado que no buscará triunfos parciales, no se verá beneficiado por ellas sino... más bien al contrario. "A mi no me ayuda, porque yo jugaba con los cambios de clasificación de la que gente que abría pista, que ese día perdía tiempo. Y ahora esos lo ganarán y me lo meterán a mí", analizaba, aunque se mostraba partidario de la medida en general: "Si evita que la gente se pare al final de la etapa, será bueno, pero creo que no será suficiente para romper los juegos de estrategia de los de arriba".
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