Tata Martino no puede sin Messi y Miami es goleado por el Atlanta de Gonzalo Pineda

Gerardo Martino y el Inter Miami parecen mostrar el inicio de lo que podría ser una dependencia a Lionel Messi. La racha invicta del equipo rosa terminó este sábado 16 de septiembre al caer 5-2 ante el Atlanta United en su visita al Mercedes Benz Stadium en lo que significó la primera derrota del club de la Florida desde que Lionel Messi llegara al equipo en julio.

Parecía que el equipo de la Florida no sentía la ausencia de su mejor futbolista porque los primero 30 minutos fueron realmente muy buenos. Incluso, fue en ese lapso en el que se puso en ventaja cuando el ecuatoriano Dixon Arroyo desenfundó un remate de larga distancia que reventó el travesaño y cuyo rebote le cayó a su compatriota Leonardo Campana. El centrodelantero se tomó todo el tiempo del mundo porque dominó el balón, le tiró un sombrero a su marca en el área y luego sí sacó la volea para gritar el 1-0.

La feria de goles de Atlanta

Pero, le duró poco la alegría al Inter Miami ya que en una ráfaga de fútbol, el local revirtió la historia. Primero fue el francés Tristan Muyumba Nkita, el que empató el partido, a los 36 minutos, luego Kamal Miller en contra puso el 2-1 a los 41 y finalmente Brooks Lennon sentenció 3-1 a los 44. Así, la historia al entretiempo terminó de la peor manera para los dirigidos por Tata Martino.

En el complemento, el equipo rosa reaccionó rápido y en un tiro de esquina, se encontró con un penal tras un disparo de Tomás Avilés que dio en la mano de un rival. Campana asumió la responsabilidad y no falló para establecer el 2-3 antes de los 10 minutos.

Parecía que el equipo de la Florida se acercaba al empate pero por fin, después de varios contragolpes dilapidados, Giakoumakis pudo anotar el cuarto tras una gran acción colectiva a toda velocidad que terminó con el delantero empujando la pelota casi debajo del arco. Sobre el cierre, Wolff aprovechó la defensa abierta para liquidar la historia con el 5-2 de la mano del DT mexicano, Gonzalo Pineda.

Cabe destacar que La Pulga no viajó con el plantel a Georgia y decidió preservar su físico para la cargada agenda que se avecina. A los 36 años, Messi decidió dosificar la acción, una determinación similar a la tomada días atrás con Argentina cuando el equipo viajó a la altura de La Paz para enfrentar a Bolivia. Leo venía de acumular 12 encuentros consecutivos en 48 días entre Inter Miami y la Selección, pero optó por frenar.