HOY en MARCA: Portada 3n2p1f
Por ROBERTO PALOMAR
Al Barcelona no le hizo falta recurrir a la exhibicin para despachar al Madrid en un partido profesional y prctico. Al Madrid y, seguramente, la Liga entera. Pellegrini fue un quiero y no puedo frente a Guardiola. Quiso quitarle el baln y no pudo.
El baln, para el Madrid, es un problema. Y cuando se encuentra con equipos como el Barcelona, tener la pelota es como salir en cueros a la calle. Por eso el Bara no gast demasiado combustible en desactivar a un rival menor. Lo esper sin descomponerse, le jug al fallo y si no lo tritur antes fue porque tampoco se vio en la necesidad imperiosa de darse un atracn. Bastaba con ganar el partido para ganar la Liga.
Cuando el Madrid disfrutaba de una superioridad ficticia, apareci Messi. Hizo un pequeo juego de prestidigitacin -nada por aqu, nada por all- y se qued slo delante de Casillas, a quien ejecut con limpieza. El Madrid no entr en depresin pero tampoco en combustin. Alcanz el descanso con la esperanza de que Pellegrini hiciera algo para sacudir el muermo.
El chileno no hizo nada. O, al menos, nada que no se esperase. Sac a Guti y luego a Ral y a Benzem para que sus jefes no le hicieran reproche alguno. Guardiola, sin embargo, movi el equipo como quien se aburre haciendo el cubo de Rubik y lo repite treinta veces. Pedrito hizo el segundo y Messi pudo haber hecho un par de ellos ms. Casillas se empe en que no se llevara el baln a casa.
El partido fue muriendo entre la impotencia del Madrid y la placidez del Bara. Ni siquiera pareca un clsico. Pareca uno de esos trmites que el Bara resuelve en el Camp Nou entre partido europeo y partido europeo. Demasiado simple.
Repasa toda la actualidad de Real Madrid y Barcelona en el tramo final de Liga.
Eduardo Inda en su particular vdeoblog, Enrique Ortego en su Partido a Tres Pases y Santiago Siguero bajo el ttulo Peor que el 2-6 analizan la victoria del Barcelona en el Bernabu.
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