Wimbledon es un torneo de dos velocidades. Una es la que pone Novak Djokovic y la otra el resto. El serbio, campeón esta temporada en el Open de Australia y Roland Garros, sigue jugando y ganando a lo grande.
El número dos mundial, defensor de la corona, ha debutado este lunes con victoria ante Pedro Cachín, por 6-3, 6-3 y 7-6(4), en 2 horas y 12 minutos.
A la evidente diferencia de ranking (2 por 68) y de estatus (94 títulos a 0) se unía el hecho de que Djokovic es el actual ogro sobre hierba mientras que Cachín apenas jugaba su segundo partido como profesional en césped. El único precedente lo había perdido con Yannick Hanfmann en el reciente Mallorca Championships.
El argentino, de 28 años, se estrenaba además en Wimbledon y en la central. No era precisamente el mejor escenario ni el mejor adversario para su bautismo en la catedral del tenis.
Cachín sorprendió de inicio a su adversario con una pronta rotura de saque. Lo que pasa es que desde el otro lado de la red respondieron con un doble 'break' para hacerse con la manga inicial. Apareció entonces la habitual lluvia de Londres para estropear la primera jornada.
Djokovic pasó ronda y ya son 29 los triunfos sin fallo en el torneo británico desde que tuvo que abandonar en los cuartos de 2017 contra Tomas Berdych por una lesión en el hombro derecho.
Desde entonces, el balcánico sólo tuvo un traspié en pasto y fue un año después en la final de Queen's con Marin Cilic. Esa fue la última vez que disputó un certamen preparatorio para el tercer 'major' del calendario. En la segunda ronda le espera el australiano Jordan Thompson.