New Jersey se ha situado en el centro de la polémica en Estados Unidos después de que un hospital comenzase a preguntar a los padres de los recién nacidos por la orientación sexual y la identidad de género de sus bebés.
Se les daba un cuestionario en el que debían marcar las diferentes opciones, algo que ha molestado mucho a los progenitores, así como al partido republicano. La senadora estatal de Nueva Jersey, Holly Schepisi, destacó: “Las preguntas incluían: ¿Cuál fue el género asignado a su bebé al nacer? Tiene género femenino, masculino, trans... El siguiente conjunto de preguntas fue: ¿Su bebé es heterosexual, gay, bisexual, de género queer?".
"Es tan absurdo y tan ridículo. Cuando publiqué esto por primera vez, mucha gente me llamó mentirosa y dijo que era un invento", explicó. “Exigir que los padres identifiquen la orientación sexual y la identidad de género de sus hijos recién nacidos es un desperdicio absurdo del tiempo y los recursos de los profesionales médicos”, señaló en un tuit.
La ley estatal de New Jersey, la culpable de todo esto
Una de las madres denunció lo ocurrido en el Hospital Vineland, de la Red de Salud Inspira, pero es algo que todos los hospitales han comenzado a hacer. Esto se debe a la ley estatal de Nueva Jersey de 2022, que exige a los hospitales recopilar más datos demográficos sobre los pacientes para brindarles un mejor servicio.
“La legislación prohibiría específicamente que se obtenga esta información de pacientes menores de edad. Si los padres desean compartir esta información voluntariamente, siempre tienen la oportunidad", aseguró Schepisi.
La empresa Inspira ha mandado un escrito a Action News explicando esto: “Inspira Health solicitará esta información a los adultos. Esta actualización del protocolo cumple con la ley”.
Por su parte, el Departamento de Salud de Nueva Jersey mantuvo que estos datos deben recopilarse de "manera culturalmente competente, incluidas las poblaciones de pacientes para las que ciertos datos pueden no ser apropiados, como en el caso de los recién nacidos". "Es una de las cosas más ridículas que he escuchado hasta ahora", sentenció la senadora.
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