No están siendo días calmados en el panorama político. La Navidad más que apaciguar las aguas y buscar la conciliación entre partidos, ha provocado una subida de revoluciones entre políticos y partidos. Después de la posible agresión entre Ortega Smith y Rubiño en el pleno del ayuntamiento de Madrid, en Galicia han estado a punto de revivir un episodio similar tras varias reproches por la situación de las aguas fecales de Cangas.
El concejal del Partido Popular, una vez terminado el pleno, ha ido a recriminar la acción de su compañero del PSOE y ha tocado incluso la cara de forma leve. Algo que no ha gustado nada a la bancada de izquierdas, que no ha increpado rápidamente al popular, llegando a repetirle en innumerables ocasiones: “Cuidadito con eso, cuidadito…”. La cosa no ha ido a mayores, pero ambos se han despachado en sus propias redes sociales tras el incidente.
“Intolerable agresión física y verbal del concejal del PP, José Luis Gestido, a la portavoz socialista, Iria Malvido, en el pleno de Cangas. Para cuando la dimisión de este señor, Alfonso Rueda y Partido Popular”, han escrito desde la cuenta oficial del Partido Socialista Obrero Español de Pontevedra.
La deposición de las aguas fecales, el origen del problema
Según informa La Voz de Galicia, el Partido Popular se presentó en el pleno con la intención de presentar una moción de censura por la postura del PSOE y su bloque de coalición en el asunto de la deposición de las aguas fecales. Después de varios encontronazos verbales y echarse la culpa unos a otros de la situación que se está viviendo en Cangas, la bancada de derechas tomó la decisión de dejar el pleno antes de tiempo. Algo que no gustó nada al PSOE y que acabó con dos de los concejales casi llegando a las manos y acusando el uno al otro.
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