El Tissot PR516 ha sido durante mucho tiempo un reloj para las personas que viven la vida al máximo. Después de que Tissot lo reintrodujera a principios de 2024, el PR516 continúa fraguando su historia con su modelo más reciente: el Chronograph Valjoux.
Presentado en la década de 1960, el PR516 ya se inspiraba entonces en el automovilismo, un universo trepidante en el que la precisión y la resistencia son esenciales. La versión cronógrafo, con su escala taquimétrica y su robusta construcción, lo convirtieron en una herramienta indispensable para los profesionales que requerían el máximo rendimiento bajo presión.
A lo largo de los años, el PR516 ha seguido siendo un símbolo de fuerza y estilo. Tissot amplía la línea PR516 y sigue espoleando a quienes buscan un reloj tan incansable como ellos en la persecución de sus metas. Un compañero que los anime a asumir cualquier reto sin dudarlo, al igual que los campeones que lo llevan.
Osadía en cada latido
El cronógrafo Valjoux dignifica la línea PR516 y lleva la sofisticación mecánica hasta límites insospechados. Conocido por su complicado diseño, el movimiento automático garantiza que el reloj se mantenga cargado mientras sigue suavemente el tiempo transcurrido, siempre listo para la acción cuando lo ordene su dueño. Esta incorporación a la familia PR516 fue una progresión natural, en línea con el espíritu audaz y centrado en el rendimiento que siempre ha definido al PR516.
En el cronógrafo Valjoux, el taquímetro y el pulsómetro funcionan al unísono, diseñados para captar cada latido cuando la vida resulta más emocionante. Con la medición de la velocidad y la frecuencia cardiaca en el bisel, y la hora claramente indicada en la esfera blanca con detalles azules, este diseño ofrece una experiencia fluida e intuitiva, que evoca el cielo sin límites. Los contadores, situados en la parte inferior de la esfera, realzan el aspecto dinámico del reloj, mientras que el cristal de zafiro acentúa su presencia.
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