Parecía un matrimonio político perfecto, al menos así lo vivieron durante meses el que era candidato a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, y el CEO de la empresa automovilística Tesla. Los dos estaban en el mismo bando y todavía resuenan las imágenes de Musk haciendo discursos políticos a favor de su amigo. Una campaña política que finalizó con el millonario de nuevo en la Casa Blanca.
Un idilio de amor que no ha durado demasiado ya que ahora parece que su separación es un hecho. Ya hubo críticas por parte de Musk sobre sus políticas económicas, pero ahora el distanciamiento, casi divorcio, es ya una evidencia. El último episodio ha llegado hace pocas horas con motivo de la reforma fiscal del presidente republicano, que ha denominado él mismo como “gran y bella”, una ley que cuenta con el respaldo de la Cámara de Representantes, pero que ahora está a la espera de saber qué es lo que dictamina el Senado.
Elon Musk: “Estoy decepcionado al ver este nuevo proyecto”
Como era de esperar, Elon no ha tardado en poner el grito en el cielo ante esta nueva reforma que a él, como empresario, ni le gusta ni le parece una solución a los problemas que padece el país. Tal y como ha comentado en una entrevista al medio CBS News, el dueño de Tesla ha dicho que está “decepcionado de ver este proyecto de ley de gasto masivo que, francamente, no solo no disminuye el déficit, sino que lo aumenta, y socava el trabajo que está haciendo el equipo de DOGE (Departamento de Eficiencia Gubernamental )”, apuntó.
El que también es el máximo mandatario del proyecto SpaceX también ha hecho notar el malestar de parte de la Cámara y del Senado y que tienen una tendencia clara republicana en cuanto a sus ideales políticos, y al parecer consideran que esta nueva ley fiscal de Trump es muy costosa y exige mayores recortes del gasto. “Creo que un proyecto de ley puede ser grande o puede ser hermoso, pero no sé si puede ser ambas cosas. Es mi opinión personal”, aseguró en la entrevista en el medio estadounidense.
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