La estancia de Miguel Carcaño sigue dando de qué hablar después de que se produjeran algunas impactantes revelaciones. Por ejemplo, se especula con que el asesino confeso de Marta del Castillo habría mantenido relaciones sexuales con una funcionaria de prisiones. El programa ‘Código 10’, en su emisión del pasado martes, 3 de junio, entrevistó a un antiguo compañero suyo y este sacó varios secretos a la luz.
Este expreso coincidió con Miguel Carcaño en Herrera de la Mancha y contó en el programa de Cuatro que uno de los responsables de cuidar y velar por ellos era el párroco. “Primero trataba contigo para ver qué clase de persona eres. No te acercabas a pedirle un cigarro, sino para hablar cosas como un problemilla”, dijo.
El párroco introducía cocaína y heroína en Herrera de la Mancha
La relación entre Carcaño y el párroco era, al parecer, muy estrecha. Además, se le podían pedir ciertas “sustancias”. Sin ir más lejos, él mismo le solicitó “hachís” tras ser aislado una vez le incautaron un teléfono móvil en uno de los habituales registros que los funcionarios realizan en las celdas.
Estando en aislamiento tenía más o con el párroco: “Entablaba conversaciones con él y le pedía a ver si me podía traer algo para fumar. Él me lo traía”. “Me pide dinero a cambio, la voluntad. Según la cantidad que trajera, le daba unos 50 o 100 euros”, añadió este expreso en ‘Código 10’, desatando caras de sorpresa entre los presentadores del espacio.
Su testimonio acabó desvelando que el párroco introducía en la prisión sustancias como hachís y cocaína. “No porque me drogase yo, pero tenía un amigo que sí”, aclaró. Además, una persona muy cercana a él llegó a tener mucha relación con este párroco: “Me dice que estoy encubierto, que tengo lo que quiero”.
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