El vóley nieve gana terreno, poco a poco, en España. La estación de esquí de Boí Taüll alberga este sábado 11 de marzo el primer Campeonato de Cataluña de esta modalidad, organizado por la Federación Catalana de Voleibol, en el que participarán seis equipos masculinos y otros seis femeninos. Se trata de un primer paso que puede servir para dar a conocer esta variante, con la nieve como protagonista clara.
Además, el vóley nieve disfruta de un reconocimiento cada vez mayor lejos de nuestras fronteras. De hecho, ya tiene un calendario europeo oficial y consolidado y, por su parte, Federación Internacional de Voleibol (FIV) trabaja para fomentar su crecimiento internacional. Muchos esfuerzos están puestos en convertir al vóley nieve en deporte de invierno.
En los Juegos de Invierno de Pyeongchang, en 2018 y de Pekín, en 2022, se realizaron distintas exhibiciones de esta modalidad deportiva. La meta de esta línea de actuación era intentar consolidar al vóley nieve como disciplina oficial en el futuro. La FIV anhela, además, crear un campeonato del mundo de snow volley, como se conoce internacionalmente.
El vóley nieve no es nuevo. Los primeros partidos tuvieron lugar en Austria y Suiza, durante la década de los 90. A grandes rasgos, esta modalidad presenta las mismas características que el vóley playa en cuanto a medidas de la pista y tipo de balón. Una de las principales diferencias es que está permitido el uso de calzado especial para mejorar el agarre.
Un campeonato de España interrumpido por la covid
El campeonato en la estación de Boí Taüll estaba previsto para los días 14 y 15 de marzo de 2020. La Real Federación Española de Voleibol pretendía realizar entonces el primer torneo a nivel estatal. Sin embargo, la evolución de la pandemia del coronavirus impidió finalmente que se celebrara el evento. Dos años después, la Federación Catalana retoma, en cierta medida, la iniciativa, con las garantías sanitarias y de organización intactas.
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