Cuenta la leyenda que en Espaa hubo una seleccin femenina de balonmano que en su tercera participacin olmpica se colg la medalla de bronce al cuello. Londres, como Corea en la final, se rindi a un grupo que ms all del resultado ha dejado para la historia la brega, entrega, sufrimiento y pasin por su deporte.

El destino quiso que Espaa y Corea se volvieran a enfrentar en Londres. El primer duelo, correspondiente a la primera jornada de competicin disputada en el Copper Box, lo ganaron las asiticas por 31-27. En este segundo, con la medalla de bronce en juego y con el Basketball Arena como escenario de juego, Espaa se quit la espina con un marcador de 31-29. En los prembulos del partido ya se not la trascendencia de lo que haba en juego, una ltima bala que gastar para quemar el cartucho de la medalla. Abrazos, nimos y traslado de confianza de jugadora a jugadora. Ni un gesto serio, todo sonrisas y buen rollo.

El partido comenz con las guerreras demostrando la intensidad defensiva que les caracteriza y que durante la semifinal ante Montenegro adolecieron. Tomaron temprana ventaja en el marcador, aniquilada por los rpidos contragolpes del equipo coreano. Pasaron del 3-1 al 5-9 y se pas del control del partido a entrar en el correcalles que favoreca a las asiticas, que abrieron brecha aprovechando la exclusin de Vernica Cuadrado. Jorge Dueas tuvo que pedir tiempo muerto para intentar tranquilizar a las chicas, en ocasiones precipitadas y perdiendo la posesin con suma facilidad. El 'Espaa, Espaa!' retumbaba en las gradas animando a las nuestras, que lograron empatar el luminoso a cinco minutos del descando (11-11) y hasta tomar dos tantos de renta merced al buen hacer de Vernica Cuadrado, Beatriz Fernndez y Begoa Fernndez en el pivote y Silvia Navarro en la portera. Al final el tiempo de asueto lleg con tablas en el luminoso.

Resolucin en la segunda prrroga
El inicio del segundo acto tuvo como protagonista a Marta Mangu, que tir del carro de un equipo, con maysculas, que se lo empez a creer. Alcanzaron su mxima ventaja, cuatro goles de renta (19-15). Dos exclusiones, de Nely Alberto y Marta Mangu, unidos a varios pasos en ataque y absurdas prdidas de baln, permitieron a las coreanas igualar el marcador a falta de seis minutos para el final (23-23). Minutos de sufrimiento, imprecisiones, dudas y cabeza fra para no perder el norte. Espaa tom ventaja con un penalti transformado por Beatriz Fernndez, pero vio cmo se encoga el brazo fruto de los nervios errando otros dos siete metros obra de la misma Beatriz y Jessica Alonso. Con tan slo uno de renta se entr en el ltimo minuto. Choi igual de nuevo la contienda de penalti a falta de 50 segundos y el partido tuvo que irse a la prrroga.

Jugarte un campeonato en el aadido es una lotera que puede salir de cualquier lado. El fsico, justo en ambos equipos, era suplido por un coraje y entrega loable en todas y cada una de ellas. El intercambio de golpes -literal- y goles fue trepidante. Espaa se fue al primer descanso con un gol de renta gracias al acierto desde los siete metros de Nely Alberto y de nuevo las intervenciones magistrales de Silvia Navarro, pero en el segundo las coreanas lograron equilibrar una vez ms la defensa, mandando el choque a una segunda prrroga.

Lleg el momento en el que cualquier fallo te poda mandar a casa. Con el depsito de la gasolina en reserva y el vello de gallina, las guerreras lo echaron todo sobre el tapete. Al descanso se fueron de nuevo con un tanto de renta. Mencin especial para Mihaela Ciobanu, que a pesar de ser su suplencia par tres penaltis clave. El gol de Jessica Amors a falta de cinco segundos sirvi de puntilla para colgar esa medalla de bronce en el corcho de la historia.

Despus de los bronces conquistado por la seleccin masculina en Atlanta 1996, Sidney 2000 y Pekn 2008, las fminas se cuelga el suyo al cuello en Londres 2012. Un bronce que forja la leyenda de las guerreras olmpicas.