Kyrie Irving también quiere ser un líder: 48 puntos y anota más en el cuarto final que todos los Jazz juntos

Kyrie Irving tiene desde su irrupción estelar en la NBA una tarea pendiente: ser un líder de un equipo contendiente, el jugador que es alma y sustento. En su carrera vivió grandes etapas, pero cuando se puso responsabilidad sobre sus hombros no terminó de brillar. Ocurrió en Cleveland, de dónde sale del "regazo" de LeBron James buscando focos, Boston y en Brooklyn puede tener sus primeros buenos síntomas de mejoría.

Como es sabido, los Nets perdieron por lesión a Kevin Durant. Las primera sensaciones fueron francamente mejorables, al perder los cuatro partidos jugados. Y Kyrie, estrella sobre el parqué, recibió críticas. "Irving sin una estrella a su lado tiene un récord perdedor. ¿Puedes ganar partidos de liga regular en un periodo corto de tiempo y ser el líder y chico a seguir? En este momento, la respuesta es no", relató el exjugador y analista de la NBA Kendrick Perkins.

No tardó Irving en reivindicarse. De la mejor forma posible, al alcanzar con 48 puntos su mejor partido del año ante los Utah Jazz. 11 rebotes, 6 asistencias, 8 triples y un tremendo 18/29 en el tiro que propició el primer triunfo de Brooklyn tras la baja de Kevin Durant.

Quiere ser el líder y alma de los Nets, y decide tirar del carro. En los dos últimos partidos ha anotado 45 puntos en los últimos cuartos. Ante los Jazz anotó 24 puntos... Los de Utah hicieron 23 en esos 12 minutos finales. Algo impresionante.

Ni corto ni perezoso, Irving decide pedir focos tras su actuación. "Puedo estar cerca de los 50 todas las noches", confesó. "Siempre intento terminar los partidos colocándome en esa posición de poder decidir. Cuando es el tiempo de ganar. Pero creo que influyó también cómo empezamos y la forma de finalizar. Siento que crecemos como equipo", explicó.