La Liga de Verano de la NBA ha visto algunas jugadas realmente absurdas furto de faltas de concentración de los jugadores y hasta de los árbitros.
En una de ellas, Niki Sibande, novato de los Mavericks, se confundió de lado de la pista en un ataque. Subió el balón y se lo pasó a su compañero Marcus Bingham Jr., que volvió a cruzar la pista y acabó machacando. La acción, claro, fue invalidada y los equipos volvieron al lado correcto de la pista.
En otra, Jarace Walker, jugador de los Pacers, lanzó un tiro libre y fue el único que se dio cuenta de que era el segundo de su serie. El lanzamiento se quedó corto, cogió su propio rebote ante la pasividad de rivales y compañeros y machacó. Los árbitros, también poco centrados, pararon la acción hasta que se dieron cuenta de que era el segundo tiro.
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