Cuando la crisis ya asomaba por la puerta, después de tres derrotas consecutivas y unas malas sensaciones, los Lakers mostraron una notable mejoría para conseguir un triunfo coral en su visita a San Antonio (101-119).
Las estrellas habituales LeBron James, con un triple-doble (19+10+11), y Anthony Davis, que acabó con 19 puntos y 14 rebotes, fueron quienes sofocaron el amago de incendio, pero los angelinos tuvieron esta vez muchos más bomberos.
El novato Dalton Knecht, que regresó al quinteto inicial, hizo 20 puntos con cuatro triples y añadió ocho rebotes. Todos los titulares superaron la decena de puntos y también los suplentes D'Angelo Russell y Max Christie.
Con todo eso, los Lakers cortaron la racha triunfal más larga que ha vivido Victor Wembanyama desde que llegara a la NBA. Con el legendario Gregg Popovich en plena convalecencia, los Spurs sumaban cuatro victorias seguidas. El prodigio francés estuvo por debajo de las prestaciones ofrecidas en las últimas noches. Se quedó en 20 puntos, 10 rebotes y tres tapones. Esta vez no llegó a los 10 triples intentados. Hizo nueve y no estuvo fino, metiendo sólo dos.
Las buenas acciones de Knecht
Los Lakers tuvieron 15 puntos de renta en la primera parte, pero los Spurs no se fueron del encuentro. Llegaron a ponerse a cuatro puntos antes de una sucesión de buenas acciones de Knecht, que anotó un tiro por elevación, después robó un balón a Wembanyama y asistió para un mate de LeBron al contraataque que evitó apuros a su equipo.
Al final del tercer cuarto, la renta volvía a ser de 15 (77-92). En el último periodo, James, que estuvo fallón toda la noche (8/18 en tiros), metió ocho puntos importantes para acabar con la esperanzas locales.
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