Cualquier persona que haya pasado por un proceso de pérdida de peso sabrá lo duro que es. Una lucha constantemente contigo mismo para conseguir el cuerpo que deseas. Pero, cuidado, podrías estar cayendo en varios errores que estarían afectando a tu proceso y, por consiguiente, desmotivándote al no poder ver los cambios físicos esperados.
Los errores más comunes
Consciente de la dificultad que supone cambiar los hábitos alimenticios y de vida a la hora de perder peso, David Marchante, ha elaborado una lista de los errores más comunes que se estarían cometiendo en los distintos procesos puesto que se repiten.
Buscar una solución mágica: es una realidad que, muchas veces han intentado vender las dietas milagro o los suplementos que te hacen perder peso de manera drástica pero esto, además de ser falso no suele ser sano y en muchas ocasiones acaban en un efecto rebote o en daños más graves para tu salud.
Déficit calórico agresivo: normalmente se intenta buscar una reducción demasiado drástica de la ingesta de calorías cuando, con una reducción de un 15% suele ser suficiente.
Falta de ejercicio físico: es una de las partes del proceso que más trabajo implica y que, en ocasiones, más cuesta arriba se hace pero es importantísima. El sedentarismo es un enemigo si nuestro objetivo es perder grasa y será uno de los cambios a realizar.
Restricción excesiva: muchas veces se intentan restringir alimentos que no es necesario eliminar de la dieta, sino moderar las cantidades. Por ello, es importante ar con un especialista que nos asesore sobre las necesidades de nuestro organismo en el proceso que estamos llevando a cabo.
Poca paciencia: como se comentaba anteriormente, los milagros no suceden. Es importante tener paciencia y entender que este es un proceso difícil y que necesita algo de tiempo, aunque los primeros resultados se suelen empezar a ver en las primeras 4-6 semanas, cada cuerpo es un mundo y funciona de manera diferente.
David Marchante, no sólo alumbra sobre los errores que se podrían estar cometiendo, sino que arroja luz sobre algunos trucos para poder lidiar con estos altibajos:
Acepta que hay una serie de factores que determinan tu éxito y no una acción principal.
Mantener un déficit calórico sostenible, en torno a un 10%-15% del gasto energético diario.
Muévete más y haz ejercicio. Cualquier momento es bueno para empezar a moverte.
Tener un equilibrio, sin eliminar alimentos pero sin hacer comidas poco saludables de manera constante.
La paciencia es nuestro aliado en cualquier cambio que queramos realizar, y este no es la excepción.
