Ms compromiso y seriedad con el deporte (por Eduardo Blanco) 1t3e49
viernes, 3 mayo 2019, 10:37
Nos encontramos en pleno perodo electoral (elecciones generales, autonmicas, municipales e, incluso, europeas) donde los partidos polticos deben presentar sus propuestas por medio de programas y viene siendo normal que el deporte, en su concepcin ms amplia y seria, sea obviado o que reciba un tratamiento poltico simplista y sesgado.
Todava los partidos polticos no se han dado cuenta de que el deporte representa mucho ms que lo que pueda leerse en las pginas "deportivas" de la prensa o lo que ofrecen las televisiones en cuanto a competiciones y espectculos deportivos; slo se muestra, principalmente, la punta del iceberg representado por el deporte profesional o de alto nivel.
Si pensamos en la gestin pblica del deporte, las istraciones pblicas que tienen asignadas competencias en materia deportiva deberan haber realizado un plan estratgico del deporte en su mbito territorial para poder aprobar esta asignatura. Basta ya de construir instalaciones sin existir un previo estudio de necesidades, descoordinado de las inversiones que se realizan desde diputaciones y gobiernos autonmicos; basta de mostrar despreocupacin por la problemtica que tiene el tejido asociativo; basta de caer en la tentacin de presentar un "proyecto deportivo estrella" que suele requerir una inversin millonaria, o basta de presentar de manera meditica a un deportista destacado como responsable de la gestin deportiva de una institucin pblica.
El deporte constituye una realidad de enorme impacto en la sociedad actual, porque adems de contribuir en un porcentaje significativo al sostenimiento del PIB o a la ocupacin laboral, si recibe un tratamiento adecuado, puede tener una proyeccin de influencia positiva en mbitos tan diversos como la salud, educacin, ocio, turismo, etc.
Esto significa que los poderes pblicos deben afrontar su intervencin en el "hecho deportivo", desde un previo anlisis y planificacin de los mbitos que son de su competencia, para poder ejecutar acciones que sean necesarias y viables, sin descuidar su nivel de prioridad. Y esto solo puede hacerse si los partidos se toman en serio el deporte y si sus programas electorales valoran la necesidad de planificar el sistema deportivo y un desempeo profesional a cargo de personas cualificadas, sin necesidad de que hayan participado en unos Juegos.
Eduardo Blanco, presidente de la Federacin de Asociaciones de Gestores del Deporte de Espaa (FAGDE)