Me he perdido, ¿otra vez había llegada neutralizada en La Vuelta?

El pregón de la undécima etapa de La Vuelta a España fue un desbarajuste. Salida de Lerma, villa de duques, que no parecía una neutralizada. La velocidad del pelotón con el coche de dirección delante marcando el ritmo era temeraria. Corrieron más al principio que al final. Hemos visto aventureros más lentos en La Saca de Valonsadero. La aventura hacia Soria, tierra de poetas, había comenzado fuerte. 168 kilómetros por campos de Castilla. Vaya cuadro.

Una fuga de 26 corredores se formaba en el kilómetro 50 de carrera. Toros como Geraint Thomas, líder de Ineos, y su compañero Filippo Ganna, ganador de la crono de ayer, aventuraban que el ritmo de carrera iba a ser alto. Y así fue. Los tres Groupama (Molard, Askey, Grégorie) y Ag2R (Godon, Touzé y Prodhomme) montaban el bullicio en la escapada. 49,7 km/h de velocidad media hasta el inicio hacia La Laguna Negra que iban dejar a más de un 'General' por el camino. Atacaba Paul Ourselin (Total Energies) en las primeras rampas de La Laguna Negra y Ganna dejaba claro que los Ineos iban a por la etapa. La subasta por la victoria había comenzado como un Sábado Agés en las Fiestas de San Juan. Ganna aplastaba la ilusión de ganar de cada uno de sus 24 compañeros de ruta trabajando para el campeón del Tour de Francia en 2018, Geraint Thomas. Pero al final era el español Jesús Herrada (Cofidis) el que ganaba en la meta de La Laguna Negra. Primera victoria de etapa española en La Vuelta España 2023. Poca pena.

Los que faltaban por moverse eran los ciclistas que luchan por la clasificación general de la carrera. Hoy no podían repetir el bochorno de las dos etapas neutralizadas que preferimos olvidar.Los Soudal Quick-Step de Evenepoel fueron los primeros en desfilar en el pelotón. Como las peñas en un Domingo de Calderas. La cuadrilla de Jumbo, con el líder Sepp Kuss, el campeón del Tour Jonas Vingegaard y Primoz Roglic, les vigilaba de cerca. Pero no se movía nadie. Aquello no era una fiesta. Nos íbamos a quedar, otra vez, sin espectáculo. Como unas sanjuaneras sin el Lunes de Bailas, dicen que el mejor día. Otra vez, para el espectador, y van muchos, fue como un martes a escuela. Esto pasa factura. El espectador no es un idiota ni el aficionado un ganapán. Al contrario de lo que llevamos de Vuelta, Soria es espectacular. Disfruten de sus Fiestas de San Juan, piérdanse por sus calles, abracen a su gente y disfruten con sus peñas. Qué linda es.

Lo que no pase en La Vuelta España 2023 no pasa en una joda para videomatch. La salida neutralizada, cuando aún va el coche de dirección de carrera por delante del pelotón y nadie puede atacar, fue rapidísima, algo extraño en una carrera en la que llevamos dos disputas de etapa con los 'Generales' de paseo, conversación y risas. Hubo una caída y Juan Ayuso (UAE), una de las grandes esperanzas nacionales para cantar victoria, besó el suelo. Tuvo que recibir asistencia médica y todo fue 'chapa y pintura'. Para los ataques que hubo al final, ninguno, de sobra con chapa y pintura.

Disculpen si suena fuerte lo de 'El pufo' pero es un recurso para expresar la pena que me da ver esta Vuelta a España. Un día pararon la etapa porque un buen corredor se fue al suelo en el llano. Y eso que a mi me dijeron que las etapas llanas también son importantes en una gran vuelta. Otro día fue el barro de los últimos kilómetros y hoy... hoy no sé cuál era el motivo por el cual no hubo ataques entre los mejores ciclistas de la carrera. Ni Evenepoel, ni Vingegaard, ni Roglic, ni Mas, ni Ayuso, ni Soler, ni Martínez... y ni al espectador le puede gustar esto.