Cada diciembre, una de las mayores tradiciones en Colombia es la congregación para el rezo de las novenas de Navidad, que se hacen del 16 al 24 de diciembre y van narrando distintos momentos desde la anunciación hasta el nacimiento de Jesucristo.
Acompañada de cantos y comidas típicas de la época decembrina, la novena reúne a familias y amigos, que celebran con repetidas frases las oraciones. Entre algunas palabras de poco uso y un estilo hablado que no es el que comúnmente se usa en los países de habla hispana de América, la gente no se ha dado cuenta que hay muchos errores idiomáticos.
¿Cuál es el error de la novena de Navidad?
Para identificar qué es lo que está mal, lo primero es ver alguno de los rezos y ponerlo como ejemplo. A continuación, la oración de todos los días y con la que se suele comenzar la novena en cada jornada:
"Benignísimo Dios de infinita caridad, que tanto amasteis a los hombres, que les dísteis en vuestro hijo la prenda de vuestro amor, para que hecho hombre en las entrañas de una Virgen naciese en un pesebre para nuestra salud y remedio; yo, en nombre de todos los mortales, os doy infinitas gracias por tan soberano beneficio. En retorno de él os ofrezco la pobreza, humildad y demás virtudes de vuestro hijo humanado, suplicándoos por sus divinos méritos, por las incomodidades en que nació y por las tiernas lágrimas que derramó en el pesebre, que dispongáis nuestros corazones con humildad profunda, con amor encendido, con tal desprecio de todo lo terreno, para que Jesús recién nacido tenga en ellos su cuna y more eternamente. Amén".
Como se puede observar, toda la oración está dirigida a Dios, que es un singular. El problema radica en la conjugación que se da de ahí en adelante con palabras como "amasteis", "disteis", "vuesto", "os" y otras, que no son la forma singular para la segunda persona (tú / vos / usted), sino que corresponden a la plural de la segunda persona (vosotros / ustedes).
En resumen, pareciera que toda la oración va dirigida a dos o más personas, cuando en realidad es a una sola. Eso sería el equivalente a hablar diciendo "tú están" o "ella oraban", lo cual es una evidente falla en el uso del idioma español. El mismo error está presente en las oraciones a la Virgen María, a San José y al Niño Jesús.
¿Cómo sería la manera correcta de la oración de todos los días?
* Las correcciones están en negrita.
"Benignísimo Dios de infinita caridad, que tanto amaste a los hombres, que les diste en tu hijo la prenda de tu amor, para que hecho hombre en las entrañas de una Virgen naciese en un pesebre para nuestra salud y remedio; yo, en nombre de todos los mortales, te doy infinitas gracias por tan soberano beneficio. En retorno de él te ofrezco la pobreza, humildad y demás virtudes de tu hijo humanado, suplicándoos por sus divinos méritos, por las incomodidades en que nació y por las tiernas lágrimas que derramó en el pesebre, que dispongas nuestros corazones con humildad profunda, con amor encendido, con tal desprecio de todo lo terreno, para que Jesús recién nacido tenga en ellos su cuna y more eternamente. Amén".
¿Cómo sería la manera correcta de la oración a la Virgen María?
* Las correcciones están en negrita.
"Soberana María, que por tus grandes virtudes y especialmente por tu humildad, mereciste que todo un Dios te escogiese por madre suya, te suplico que tú misma prepares y dispongas mi alma y la de todos los que en este tiempo hiciesen esta novena, para el nacimiento espiritual de tu adorado hijo. ¡Oh dulcísima madre!, comunícame algo del profundo recogimiento y divina ternura con que lo aguardaste tú, para que nos hagas menos indignos de verle, amarle y adorarle por toda la eternidad. Amén".
¿Cómo sería la manera correcta de la oración a San José?
* Las correcciones están en negrita.
¡Oh santísimo José, esposo de María y padre adoptivo de Jesús!, Infinitas gracias doy a Dios porque te escogió para tan soberanos misterios y te adornó con todos los dones proporcionados a tan excelente grandeza. Te ruego, por el amor que tuviste al Divino Niño, me abraces en fervorosos deseos de verle y recibirle sacramentalmente, mientras en su divina esencia le veo y le gozo en el cielo. Amén".
¿Cómo sería la manera correcta de la oración al Niño Jesús?
* Las correcciones están en negrita.
Acuérdate, ¡oh dulcísimo Niño Jesús!, que dijiste a la venerable Margarita del santísimo Sacramento, y en persona suya a todos tus devotos, estas palabras tan consoladoras para nuestra pobre humanidad agobiada y doliente: "Todo lo que quieras pedir, pídelo por los méritos de mi infancia y nada te será negado". Llenos de confianza en ti, ¡oh Jesús!, que eres la misma verdad, venimos a exponerte toda nuestra miseria. Ayúdanos a llevar una vida santa, para conseguir una eternidad bienaventurada. Concédenos por los méritos infinitos de tu infancia la gracia de la cual necesitamos tanto. Nos entregamos a ti, ¡oh Niño omnipotente!, seguros de que no que dará frustrada nuestra esperanza, y de que en virtud de tu divina promesa, acogerás y despacharás favorablemente nuestra súplica. Amén".
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