El relato de Yolanda desde el hielo: "Verde, rojo, negro, blanco y azul"

Se considera runner, es maratoniana, la más veterana del noveno Reto Pelayo Vida con sus 53 años y comparte con sus compañeras estos días los relatos de Patagonia 2023 en el viaje que siempre soñaron tras superar el maldito cáncer.

Yolanda Cerezo, arquitecta madrileña, nos cuenta desde el refugio de Gorra Blanca en la víspera del asalto a la cima del Reto lo vivido hasta ahora. Ahí va su relato:

'Verde, rojo, negro, blanco y azul'

Verde Kica

El verde es Kica, que es el color de la esperanza, de la vitalidad, del renacer y es el color que nos acompañó en la primera etapa camino del Refugio del Fraile, en ese bosque repleto de lengas.

Rojo Sonia

El rojo es Sonia, el color del Cerro Eléctrico, La Playita, de la tirolina, del camino que hicimos hasta el campamento el segundo día. Sonia es el rojo, todo energía a raudales, es como el alma del equipo.

Negro Laura

El negro es Laura, un volcán en erupción, muy explosiva, súper explosiva. El tercer día nos acompañó el color negro de las montañas, la roca volcánica, el color de Laura.

Blanco Anna

El blanco es Anna. El cuarto día el color que protagonizó todo fue el blanco cuando entramos en el glaciar y estaba nevadísimo, con el hielo patagónico... Esa es Anna, la calma, la pausa, la tranquilidad.

Azul Yolanda

(Se corta la llamada con el satélite)

Seguramente Yolanda estaba oteando el cielo azul mientras imaginaba a las cinco haciendo cumbre en el Cerro de Gorra Blanca. Y en esa mirada encontraba a su añorado padre, fallecido hace ahora tres años cuando le diagnosticaron su tercer cáncer justo al mismo tiempo que a Yolanda le descubrieron la enfermedad. Su padre ha estado muy presente estos días en un reto que lleva dedicatoria mirando al cielo azul que estos días ha lucido junto al frío y el viento en el helado campo patagónico. El azul es Yolanda.

Maratoniana extrema

Yolanda Cerezo lleva desde los 15 años haciendo running y después de ser madre de sus tres hijos apostó por ser maratoniana (lleva 7 en Madrid). No conforme con eso incluso se atrevió a hacer maratones extremos alpinos que pusieron a prueba su resistencia. "El deporte ha sido mi tabla de salvación junto a mi familia, que somos muy piña".

Por eso, esta vecina de Alpedrete resiste en el Reto al que se apuntó tras leer la historia de cinco supervivientes de cáncer de mama en Jordania 2022. El sueño está a punto de cumplirse.

Antes del asalto final a la helada cumbre del Cerro de Gorra Blanca (2.920.metros), la expedición del Reto Pelayo Vida realizó una travesía de 5 horas en el hielo caminando con lluvia y frío. Anoche, Yolanda, Kica, Anna, Laura y Sonia descansaban en las tiendas tras montar su campamento con bloques de hielo de 7 metros de largo y 1,30 de alto para protegerse del frío y del viento. Hoy la gloria les espera en lo más alto. Y seguro que lucirá el cielo azul.