- Crónica. Edu Espiau sentencia en el último suspiro
- Nuevo proyecto. El 'Queso Albés', un bocado exquisito
Sergi Maestre debutó hace unas semanas en Segunda división a los 31 años de edad. El centrocampista catalán posee un currículum envidiable en Segunda B y Primera RFEF en equipos de prestigio como Lugo, Zaragoza B, Real Murcia y Badajoz, entre otros, donde ha sumado más de 300 partidos de liga, pero jamás se le había ofrecido la posibilidad de jugar en el fútbol profesional.
¿Por qué no jugué antes en Segunda? Porque simplemente no se dio esa posibilidad, no sé el motivo pero nunca recibí una oferta
Por si fuera poco, el año pasado sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla que le tuvo convaleciente durante ocho meses, así que la cosa no pintaba muy bien. "Estoy muy contento porque no me esperaba debutar tan pronto. Han sido muchos meses sin competir, además de un entrenador nuevo, así que no pensaba que iba a entrar tan pronto en las rotaciones del equipo", confiesa Maestre.
"Me está costando coger el ritmo de la competición porque no pude disputar ningún partido de pretemporada, pero a nivel físico estoy muy bien y la rodilla no me da ningún problema. ¿Por qué no jugué antes en Segunda? Porque simplemente no se dio esa posibilidad, no sé el motivo pero nunca recibí una oferta", explica el centrocampista catalán del Albacete.
El buen inicio del Albacete
Maestre ha debutado en el equipo de moda, un Albacete Balompié que juega muy bien al fútbol. "Estamos muy bien, el equipo es muy vertical, ataca rápido y por la reacción del público creo que es lo que la gente quiere ver. Pero hay que tener mucho cuidado, en esta categoría cada error se paga, en Segunda B los errores no te castigan tanto, un fallo te cuesta un partido y ya lo vimos el pasado domingo".
El domingo viene el Andorra, el equipo que dejó al Albacete sin la primera plaza el año pasado. "Para los que estábamos el año pasado queda un poquito de revancha porque fue muy duro perder en su campo ante toda la gente que se desplazó hasta Andorra para apoyarnos. Logramos el objetivo del ascenso por el camino largo, pero ese gusanillo quedó", concluye Sergi.