- Atlético. Barrios: "Veníamos de jugar 120 minutos, pero estábamos mentalizados de lo que teníamos que hacer"
- Atlético. Simeone: "Julián venía descompuesto, con fiebre... y jugó como vieron"
Casi un mes después de visitar Mestalla el pasado 22 de febrero, el Atlético terminó este domingo su maratón de partidos que le ha llevado a enfrentarse en dos ocasiones al Barcelona, otras tantas al Real Madrid, recibir al Athletic y visitar el Coliseum en un duelo que tuvo varias consecuencias más allá de la pérdida de los tres puntos.
Los rojiblancos comenzaron esta cadena de encuentros a un solo punto del líder de la clasificación y ahora se encuentran a cuatro de un Barcelona que tiene un partido menos. Además, se han despedido de la Liga de Campeones y tienen igualada la eliminatoria de la Copa del Rey frente a los azulgrana.
Pero más allá del número de ocasiones en las que ha tenido que competir es digno de destacar la forma en la que el conjunto de Simeone lo ha hecho. A la entidad de los rivales y la cercanía los partidos, había que sumar los obstáculos que se ha encontrado por el camino.
Para empezar, la lesión de Koke y la sanción de Pablo Barrios obligó a Simeone a contar con De Paul en la medular en Mestalla sólo tres días antes de medirse al Barcelona en Copa. Ante esta situación, el argentino apenas pudo respirar y ha tenido que jugar los siete encuentros con la exposición a una posible lesión que ello conlleva. De hecho, ante el Getafe sufrió un duro golpe que le llevó a abandonar el campo y le limitó para jugar contra el Real Madrid, cuando no pudo disputar la prórroga, y contra el Barcelona en Liga, cuando estuvo por debajo de su nivel habitual. La baja del capitán también ha obligado a mover a Llorente del lateral y en la banda izquierda, Azpilicueta también cayó en el momento en el que iba a sustituir a un Galán que sufrió demasiado en el Santiago Bernabéu.
Otra piedra que se ha encontrado por el camino Simeone ha sido la expulsión de Correa frente al Getafe. Más allá de que terminar con un futbolista menos le costó al Atlético tres puntos, su posterior sanción dejó al cuerpo técnico rojiblanco sin revulsivo para el último duelo ante el Barcelona. Con Julián mermado físicamente por el proceso febril que atravesaba, los entrenadores colchoneros tuvieron que contar con La Araña al tener una importante ausencia en la delantera.
Con todas estas dificultades el Atlético ha competido frente a Real Madrid y Barcelona pese a tener una plantilla inferior a la de los dos grandes del fútbol español. Pese a contar con una estrella mundial como es Julián Alvarez, el presupuesto que manejan los rojiblancos es notablemente menor al de su rivales y tiene menos armas para competir en este tipo de ocasiones. Ancelotti y Flick manejan más calidad y más efectivos para poder rotaciones y Simeone está obligado a desgastar más a sus futbolistas como se ve en el hecho de que Giuliano, De Paul y Griezmann jugaran los siete encuentros como titulares, Julián saliese de inicio en seis y tuviera protagonismo en siete y Llorente o Lenglet hayan llegado al parón con la gasolina al límite por la acumulación de minutos.
Los grandes sufren contra el Atlético
Debido a todo lo sucedido, quizá Simeone debería haberse planteado apostar por una competición y hacer una excepción en su tan conocido partido a partido. Ser ambicioso y contar con un ADN competitivo le ha podido costar al Atlético dejar de luchar por alguno de los torneos en una temporada donde todavía tiene las opciones intactas en la Copa del Rey y quizá no está totalmente descartado para LaLiga.
Y es que no hay que olvidar que en esta ocasión la moneda cayó en el lado de la cruz para el Atlético, pero con sus armas y un gran trabajo colectivo los rojiblancos exigieron al máximo al campeón de Europa y le han demostrado al equipo que mejor fútbol practica en el continente que no le será fácil llegar a la final de Copa. Los blancos pasaron de ronda en Liga de Campeones tras una polémica tanda de penaltis y los culés se llevaron un buen susto con el 2-0 inicial en el duelo del Metropolitano.
Finalmente, no hay duda de que el parón liguero llega en el mejor momento posible para un Atlético que tratará de coger aire y recuperar las piernas de buena parte de sus futbolistas para seguir molestando a los dos equipos favoritos para ganar todos los títulos en el fútbol español.
Comentarios