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Joan Laporta accedió a la presidencia el pasado 7 de marzo de 2021 y estos casi cuatro años ha acostumbrado a los aficionados del Barcelona a apurar los plazos para todas las operaciones: avales, mercado de fichajes, inscripción de jugadores... La complicada economía de los culés ha propiciado que el presidente catalán siempre viva al límite... y ahora con Dani Olmo y Pau Víctor se ha, incluso, excedido del plazo. Aunque la institución aún busca una solución a la desesperada. Por primera vez, el abogado ya tiene el susto en el cuerpo.
El inicio de mandato de Laporta ya dejó pistas de lo que iba a ser su segunda presidencia en el Barcelona. Logró los avales para ser nombrado máximo dirigente sobre la bocina, sufriendo. Sobre el papel, parecía que esa gesta iba a quedar en una mera anécdota pero sólo seis meses después se repitió la historia con la cesión del Griezmann al Atlético y la llegada Luuk de Jong. Incluso, el anuncio del fichaje del delantero no se hizo hasta las 3.30 horas, a la espera de que LaLiga revisase toda la documentación.
Pero aquí no se acabó esta historia. La destitución de Koeman en octubre de 2021 y la llegada de Xavi, también fue de madrugada. En enero de 2022, el Barcelona firmó a Aubameyang y toda la documentación entró un minuto antes del cierre del plazo. Laporta ya empezaba a moverse con naturalidad en los últimos suspiros.
En verano de ese mismo año, el Barcelona empezó a sufrir y mucho con las inscripciones de los jugadores. Koundé tuvo que esperar hasta la tercera jornada para poder debutar oficialmente con el conjunto catalán porque el club no lo pudo dar de alta antes.
Fuera de plazo
En 2023, fue Gavi el protagonista de la historia. En marzo el andaluz volvió ser inscrito como jugador del equipo juvenil y con el dorsal 30, dejando a un lado el '6'. Según LaLiga, el club no actuó en el tiempo establecido ya que presentó la demanda fuera de plazo. En verano, otra vez los culés vivieron un mercado sobre la bocina con la llegada de Joao Félix y Joao Cancelo.
Este pasado mercado, la lesión de Christensen permitió que Dani Olmo pudiese inscribirse a última hora. Pero este enero, Laporta ya no ha podido solventar la solución en los plazos previstos, antes del 31 de diciembre. Habrá que ver si aún le queda una última carta... de momento tanto ha ido al límite...
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