Ayer se cumplió un año del último partido oficial de Isco Alarcón con el Sevilla. Fue el 13 de noviembre de 2022 en la victoria por 0-2 del conjunto nervionense frente al Velarde, en la primera ronda de la pasada edición de la Copa del Rey. Una hora estuvo el malagueño sobre el terreno de juego en el equipo que dirigía Jorge Sampaoli. Días después, las competiciones nacionales se interrumpieron para que las selecciones arrancaran su preparación para el Mundial de Qatar y la estancia del centrocampista de Arroyo de la Miel en Nervión comenzó a torcerse, hasta que a finales de diciembre se anunció su rescisión de contrato.
Un año después de aquella última aparición de Isco con la elástica nervionense, la vida ha dado un giro de 180 grados para el talentoso centrocampista... sin salir de la ciudad. Ha encontrado en el Betis el lugar en el que poder desplegar todo el fútbol que sigue llevando dentro hasta el punto de convertirse en la auténtica referencia ofensiva del equipo de Pellegrini. En su primer derbi sevillano (no jugó ninguno durante su etapa en su anterior club), que afrontó este domingo como jugador bético, Alarcón sumó su noveno MVP en 13 jornadas de Liga. Y la petición para que regrese a la Selección empieza a ser algo casi unánime.
En su etapa en Nervión el malagueño participó en 19 partidos oficiales entre todas las competiciones, con un gol, tres asistencias y 1.265 minutos de juego. Este domingo, en la que fue su casa durante unos meses, Isco superó ese registro de estancia sobre el campo, ahora como verdiblanco. En el Betis alcanza ya los 17 encuentros con tres goles, tres asistencias y 1.296 minutos. Y los resultados son radialmente opuestos: cuatro victorias, seis empates y nueve derrotas con el Sevilla, ocho victorias, seis empates y sólo tres derrotas con el Betis.
Teniendo en cuenta que Isco aterrizó en el Benito Villamarín como agente libre y con un sueldo ajustado, que mejora con bonus por goles y asistencias, parece evidente que se trata sin duda de uno de los mejores fichajes de la temporada en LaLiga, al menos hasta el momento. En cuanto alcance los 25 partidos, algo que puede hacer antes de que termine 2023, renovará automáticamente otra temporada más, hasta 2025. Pellegrini, que apostó por él hace 12 años firmándolo para el Málaga, ha recuperado su mejor versión. Y un año después de su último partido con el Sevilla, Isco vuelve a sonreír.
