"Grazie Inter" y "Merci Monaco", cuatro palabras, dos en italiano y dos en francés, un agradecimiento... que puede costar un matrimonio. Joaquín, autor de las dos pancartas que 'metían el dedo' en la llaga culé, relató en MARCA cómo consiguió escaparse para intentar levantar la moral de los jugadores del Madrid. No es la primera vez que lo hace, de hecho Bellingham en su día publicó uno de sus famosos mensajes..
Junto a las pancartas que 'presiden la puerta' de Valdebebas, Joaquín ha colocado varias banderas y bufandas del Real Madrid. Mención especial para sus peluches, siete osos enfundados con sus camisetas merengues. No es la primera vez que este aficionado blanco aprovecha una victoria de los suyos, o una derrota culé, para acercarse a "animar a su Madrid".
Lo curioso de la situación es el 'modus operandi' que ha tenido que poner en práctica para poder ir, tras la victoria del Inter y el Mónaco en baloncesto, a Valdebebas. Una excusa y un reportaje, este, que desmontará la mentirijilla que le contó esta mañana a su mujer cuando le dijo que le acercase a hacer unos recados. "Este año no me lleva a Benidorm, le dije que no podía, que tenía lío y me vine hasta aquí", narra Joaquín.
No es la primera vez que este aficionado carga su Audi ranchera, se tuvo que comprar este modelo porque en uno normal no le cabían los peluches, y se presenta a la puerta de la ciudad deportiva del Madrid para alentar a los suyos. En una ocasión, Bellingham replicó uno de sus mensajes de ánimo. "Me lo contó mi hijo, yo eso de las redes sociales no lo manejo", continúa Joaquín.
Los peluches los recoge de la calle, los lava y viste del Real Madrid. Las telas para las pancartas las 'cosecha' de hoteles del centro de la capital que ya no las usan y se las guardan. Malabares varios para aportar su granito de arena y ver "ganar a su Madrid".
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